Fondo Indígena Número 2

Mi discípula periodística me sacó a bailar una cueca y cuando yo me hallaba a punto de clavar el pico, me ordenó sonriendo: “¡No hay primera sin segunda!!!” y tuve que obedecer porque ella es un dama a pesar de ser una cholita cochabambina.

Cuando me encontraba a punto de desfallecer, me dijo en tono burlón: “no se me muera, respetado compadrituy, porque a continuación le cuento que acabo de enterarme de que el jefecito Evo Morales ha decidido iniciar las actividades del Segundo Fondo Indígena y ha designado a Eugenio rojas como Jefe de esa apetecida entidad.

Al escuchar esa insólita noticia me dio un soponcio y Macacha tuvo que ofrecerme de inmediato un mate de toronjil que me reanimó y me obligó a insinuarle que no volviera a pedirme una “segundita” porque a mis años ya no estoy para esos trotes.

Al volver la calma a nuestra sala de redacción le pregunté a mi reportera si ella conocía al afortunado ciudadano que manejará los cuantiosos dineros del Fondo Indígena Número Dos, contestando la periodista que eso no importaba porque ni ella ni yo podríamos aspirar ni a un centavo de esos caudales que sólo pasarían por las manos del afortunado Rojas y del mandamás que habita en el Palacio Real de la plaza Murillo, aunque ahora ejercita sus primeros pasos en la Residencia Presidencial de San Jorge. Naturalmente, se me ocurrió preguntar por la salud quebrantada de la ciudadana Nemesia Achacollo, quien durante un quinquenio fuera ministra del presidente Morales y presidenta del Fondo Indígena.

La cholita valluna, quien es una sabelotodo y no simpatiza con la Nemesia por ser tocaya de su difunto marido, me respondió con fastidio: “Ya le dije, pues, el otro día, que está enferma de “indi-gestión”, pues ha comido del Fondo Indígena Número 1, entonces está “indigestada en su propiedad ganadera que adquirió en el Departamento de Santa Cruz”.

Teniendo en cuenta que hace pocos días comenzó el Fondo Indígena Número 2, Macacha me manifestó que posiblemente los fiscales y que simpatizan gratuitamente con el gobierno de Evo tratarán con mayor dosis de afecto a la que fue Primera Presidenta, por ser la pionera en esa noble empresa, cuyos dineros no sólo sirvieron para repartirlos entre sobresalientes adeptos del actual régimen sino también para actividades promovidas por el régimen actual, como aquellas invitaciones a movimientos sociales de todo el mundo, porque al fin y al cabo tales gastos correspondían a los indígenas.

De eso y muchas cosas más me pude enterar gracias a mi buena suerte por haber conocido un día a una cholita preguntona y sabelotodo.