Los Tunkas disfrutan de un mundo diferente

Los marchistas cuentan sus experiencias vividas en la Villa Olímpica, a la espera de su competencia.


Los marchistas nacionales Rodríguez, Cornejo, Castro y Quispe en la Villa Olímpica.

Los atletas nacionales viven jornadas diferentes cada día en la Villa Olímpica, la ansiedad juega un papel importante a la espera de competir y representar al país. Los denominados Tunkas Wendy Cornejo, Ángela Castro, Marco Rodríguez y Ronadl Quispe, consideran que están en otro mundo codeándose con los mejores atletas del mundo.

“Mi sueño se hizo realidad. Es algo hermoso y hasta ir a almorzar es otro mundo, son comedores gigantes, lo mismo el policlínico, la plaza de visitas, todo es increíble”, dijo la paceña Cornejo, quien sueña con algún momento obtener las mejores condiciones para todos los atletas nacionales.

La aventura empezó para los Tunkas que son apoyados por la Cervecería Boliviana Nacional (CBN) junto con el Ministerio de Deportes, por un ciclo de cuatro años. “A dos semanas para la competencia estamos entrenando, aún no hay nervios, pero seguro aparecerán cuando estemos más cerca de la competencia, pero hay que saberlos manejar”, dijo la abanderada Castro.

Sin duda es diferente caminar y encontrarse con un Usain Bolt, con un Rafael Nadal o en el comedor estar al lado de atletas del primer mundo que antes los miraban en la televisión y están cerca de ellos, sobretodo, ser tratados como ellos.“Ha sido emocionante verlos en la inauguración, yo saltaba y gritaba de emoción”, agregó Cornejo.

Más allá de experiencia que tiene los Tunkas, el objetivo es llegar en una mejor posición tratar de romper su marca para darse por satisfechos, porque todavía se mira muy lejana la opción de ganar una medalla.“Contamos los días para la prueba, la verdad nos tratan muy bien en la Villa. Desayunamos, luego entrenamos, luego a recuperación. Por la tarde almorzamos, descansamos y a entrenar de nuevo. Es un trabajo de mucha concentración”, explicó Marco Rodríguez.

La profesora Martha Marín toma todas la previsiones para combatir la deshidratación, debido a la alta temperatura que existe en Río de Janeiro y la prueba en marcha para la rama masculina y femenina serán exigentes y con un largo recorrido.

“Ella (Martha Marín) sabe lo que es mejor, ayer hicimos distancia larga”, contó Quispe.

La dieta comienza a ser fundamental para los marchistas que deben mantener su peso para no estar con kilos demás al momento de la carrera, a pesar de la deliciosa comida.

 
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