Las condiciones meteorológicas que combinan fuertes vientos y baja humedad están dificultando las labores de equipos bomberos de varios estados del oeste de EEUU, donde los incendios forestales han consumido miles de acres de bosques y obligado a tomar medidas preventivas de evacuación de viviendas.
En Arizona, un incendio forestal en desarrollo podría amenazar potencialmente una carretera que sirve un área del Gran Cañón.
Aproximadamente 430 efectivos están trabajando en las labores de extinción de este incendio causado por un rayo que encendió un bosque de álamos y pinos el 29 de junio.