Ciudadanos protestan por deficiencias en centros de salud

Otra de las preocupaciones para los vecinos de la zona Villa Cooperativa es el funcionamiento del centro de salud del barrio, entidad que, a pesar de contar con una infraestructura adecuada para convertirse en un hospital, carece de equipamiento médico y personal.

Otro de los perjuicios es la falta de personal, ya que la designación de galenos ha quedado postergada. Por estos motivos, este centro de salud solamente brinda atención general y parte de la especialidad de odontología.

Cabe destacar que a este nosocomio no solo asisten pacientes de esta zona, sino de habitantes de otros barrios, por lo que todo este problema es una preocupación para la dirigencia y sus mismos habitantes, quienes, cansados de soportar esta desatención, advirtieron que tomarán acciones de hecho como una marcha de protesta que se dirigirá hasta las oficinas de la Alcaldía central de El Alto.

Asimismo, se debe tomar en cuenta que el nosocomio carece también de medicamentos para la atención de los pacientes.

Como medida de protesta, vecinos y dirigentes anunciaron que esperarán hasta hoy para que las autoridades cumplan con las solicitudes, especialmente en lo referente a la dotación completa de medicamentos. De no ser atendidos, asumirán la medida anunciada, porque, a pesar de las numerosas veces que se ha insistido en este tema, el Municipio no cumple con este cometido.

SEGURIDAD CIUDADANA

En cuanto a la seguridad ciudadana en la zona, poco o nada significa para más de 3 mil habitantes la presencia de dos efectivos policiales que fueron dotados a la zona por parte del Regimiento 5. Al respecto, los dirigentes del barrio aseguran que en repetidas oportunidades extendieron su reclamo a las autoridades correspondientes, sin embargo, como respuesta, sólo les fue informado que la entidad no cuenta con el personal suficiente.

“En nuestra zona existe mucha delincuencia, por eso nosotros hemos optado por tomar algunas decisiones en caso de la presencia de antisociales en el barrio como medida de advertencia. El toque de la campana de la iglesia de nuestra zona o los petardos y silbatos son nuestros mecanismos, no nos queda otra”, dijo el presidente de la zona, Ramiro Alí.