Segregación de género en las actividades sociales de los musulmanes

La segregación de género en diversas actividades para los musulmanes es una situación que se puede ver habitualmente en las mezquitas, donde hombres se congregan en un área del lugar y mujeres en otra área, pero también se ve esta práctica en muchas actividades sociales como matrimonios y otras reuniones incluso familiares.

La explicación de la segregación de género se sustenta en la existencia de edictos religiosos que interpretan el Corán (el libro sagrado de los musulmanes), y los dichos del profeta Muhammad (sunah) señalando que la interacción entre hombres y mujeres que no son familiares, debe ser mínima, debiendo evitarse cualquier contacto físico, incluso el estrechar las manos. Sin embargo la rigurosidad de la interpretación de lo determinado por el Corán, el cual no expresa textualmente la segregación de género, varía de país a país.

Los matrimonios, por ejemplo, son eventos sociales donde los varones celebran en un área del lugar bailando en grupo, y las mujeres en otro, no necesariamente distintos espacios, puede ser el mismo salón, pero no están juntos bailando entre parejas, con excepción de los novios que sí lo hacen. Cabe aclarar que algunas familias musulmanes más conservadoras prefieren no realizar celebraciones con música en algún salón de eventos, sino simplemente celebran en una mezquita con familiares y amigos cercanos compartiendo alguna bebida no alcohólica como té y algo dulce de comer.

En reuniones familiares si bien la mayoría de las veces todos los asistentes comparten la comida en una misma mesa, después los hombres de la familia se reúnen en un área de la casa para charlar entre ellos y las mujeres hacen lo mismo.

En Egipto, por ejemplo, existen muchos salones de belleza donde hay áreas sólo para mujeres, donde son atendidas por estilistas del género femenino, debido a que los grandes salones tienen en su mayoría como estilistas a hombres. En cuanto a los gimnasios, un gran número de ellos tiene áreas privadas para mujeres con entrenadoras. En tiendas, centros comerciales y restaurantes no hay segregación de sexos como sucede en otros países musulmanes.

Arabia Saudita es uno de los países donde hay más segregación de género en las actividades públicas, por ejemplo tienen grandes centros comerciales (malls) con días específicos para que vayan familias y otros únicamente para hombres, también existen galerías comerciales solamente para mujeres. De igual forma sucede con los restaurantes, que tienen áreas específicas para familias y otras para solteros.

En Irán su servicio público de metro tiene vagones especiales únicamente para mujeres, y los buses están divididos en dos áreas, para mujeres y hombres.

Para una persona que no ha vivido en una sociedad donde exista la segregación de género cuesta al principio entender las razones y adaptarse a estas prácticas, pero con el tiempo y al entender los motivos religiosos que sirven de sustento, pasa a ser parte de la vida normal, considerando, claro está, que Egipto no es una sociedad donde la segregación de género esté presente en todas las actividades públicas. Muchos egipcios, por ejemplo, consideran muy difícil acomodarse a estas prácticas que son más rigurosas en Arabia Saudita, y generalmente después de vivir un tiempo allá vuelven a su país, donde el Islam se practica de forma más moderada que en otros países musulmanes.

La autora es abogada boliviana, reside actualmente en El Cairo, Egipto.