Gobierno confirma interés de centralizar recursos

El rechazo del Gobierno a la propuesta de redistribuir los recursos económicos de forma equitativa es una clara muestra que la actual administración del Estado quiere seguir con una política centralizadora y no dar oportunidad a las regiones de administrar sus recursos y ejercer sus autonomías

El análisis parte del senador de Unidad Demócrata, Arturo Murillo, y el analista Carlos Cordero.

MURILLO

“Lo que está claro en el Gobierno, es que quiere abarcar la mayor parte del presupuesto, con la finalidad de seguir priorizando proyectos que beneficien a regiones donde está gobernando el Movimiento Al Socialismo (MAS)”, sostuvo Murillo.

En criterio del legislador, el Gobierno también tiene la intención de atender solamente proyectos de los movimientos sociales, aspecto que se vio en el pasado con el Fondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino (Fondioc) y que no fue saludable para el país.

Murillo cuestionó que el partido de gobierno no aproveche el Presupuesto General del Estado, porque invirtió en el Ingenio Azucarero de San Buenaventura y en la exploración de petróleo de Lliquimuni, en La Paz, además del aeropuerto de Chimoré, proyectos que no dieron réditos a las regiones y al país.

Ese fue uno de los motivos para plantear que los departamentos requieren de una mejor redistribución de recursos.

CORDERO

Para el analista Carlos Cordero, el Gobierno quiere mantener el 80 por ciento del Presupuesto estatal, porque necesita mantener vigente la imagen pública del presidente Evo Morales entregando obras pequeñas y de gran magnitud, aspecto al que considera que es un cálculo político.

“El Gobierno considera que si cede en incrementar y redistribuir los recursos a las gobernaciones, hará crecer políticamente, por ejemplo a Rubén Costas y Félix Patzi, elemento que es rechazado por el Gobierno central. El presidente Morales debe mostrar una imagen de autoridad y liderazgo ante los grupos sociales que lo apoyan”, explicó.

Cordero dijo que los gobernadores quieren un Pacto Fiscal, porque comienzan a mostrarse a nivel nacional, además tienen la intención de que se haga realidad el Pacto Fiscal en sus gestiones, ambos elementos fueron calificados también como un cálculo político.

El analista indicó que un nuevo Pacto Fiscal requiere de años de construcción, además de las autonomías, aspecto que se puede lograr, en caso de que las autoridades dejen de lado sus intereses políticos, porque un Pacto Fiscal y la buena redistribución de recursos marcarán el futuro de la nación y de los departamentos.