Imperdible triada de conciertos

Estamos viviendo tiempos excepcionales los que amamos la música, por el concierto de Música de Maestros con la Orquesta Sinfónica Nacional, el Concierto de Guitarra de Marcos Puña interpretando música de Eduardo Caba y otros que nos hicieron vibrar de emoción.

Pero lo extraordinario es la preparación de Bolivia Clásica del programa de Aires del Barroco que se ha dado en tres escenarios: en el Salón de la Cancillería, en el Círculo de la Unión y en el Teatro Municipal, salas que podemos decir fueron improvisadas para la calidad de tales eventos, si bien son lo más destacado que ofrece nuestra ciudad.

Grieg, los españoles Albeniz y Granados en la primera presentación, Mendelsson y Schubert, donde escuchamos a la soprano Sara Hershkowitz acompañada por ¡nuestra Ana María Vera al piano!, transportaron al auditorio a un mundo etéreo de armonías inmarcesibles. El segundo concierto fue espléndido, con la participación de la Orquesta de Cámara Juvenil de Bolivia Clásica de Armando Vera, dirigida por otro coloso, David Stern, seguido del dueto de Cleopatra y César de Handel, cantada por la soprano y mezzo-soprano Sara Hershkowitz y Sophia Stern, respectivamente; concluyendo con la revelación de Lucas Viscarra en el clarinete, que recitaba con la soprano Hershkowirz y el acompañamiento de Ana María Vera, en la composición de Schubert, Der Hirt auf dem Felsen, ¡acaso fue lo más extraordinario en el primer y segundo concierto!

El último concierto, que un viaje inoportuno nos privó de escuchar, comentan que fue extraordinario.

No es solo el delirio de darnos música, la Fundación Bolivia Clásica nos da además, sorpresas maravillosas, en su corta vigencia. Hemos apreciado éxitos destacables: la formación de la Orquesta de Cámara Juvenil de Bolivia Clásica, compuesta por unos 18 músicos bajo la Dirección de Armando Vera, nos ha deleitado con una excelente ejecución de obras de maestros de primer nivel; uno de los talentos formados por la Fundación, el violinista Gabriel Bilbao Toledo de La Paz, ¡ha obtenido una beca para ingresar al Festival Verdier de entre cientos de postulantes! Otra joven talentosa chelista, Valeria Escalera, de Cochabamba, que se inició en el Instituto Laredo, obtuvo una beca para estudiar en París con el renombrado maestro Michel Straus; Marco Pérez, un talentoso pianista, también obtuvo becas de verano para estudios en Nueva York en 2015 y 2016; tenemos también al admirable Lucas Viscarra que, cada vez más, nos sorprende con una gran afloramiento virtuosista en el clarinete; un prometedor violinista, Marcos Lazarte, de unos 12 años, ha demostrado sus aptitudes con el maestro Stern. El descubrimiento y formación de estos meritorios talentos es obra de la Fundación Bolivia Clásica. Finalmente, Bolivia Clásica ha recibido la donación de 60 instrumentos de cuerda de la famosa Casa Aaron Robertson, por gestiones de Jaime Laredo y su esposa, para el programa de formación musical de Bolivia Clásica.

Como se muestra, son logros muy significativos de la Fundación Bolivia Clásica a favor del descubrimiento de nuevos talentos en nuestro país, que solamente esperan una varita mágica que los despierte para la difusión y brillo de la música clásica en Bolivia: todo esto gracias a la entrega y desprendimiento de los hermanos Vera Woutstra que se consideran bolivianos. Podemos asegurar que los éxitos alcanzados superan cualquier emprendimiento que pudiera haber acometido el Gobierno.

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