Sucre (agencias).- La fuerte tormenta que anegó la capital en menos de una hora en la noche del pasado lunes dejó ayer como saldo lodo, agua y escombros, según informó Alerta Temprana del Gobierno Municipal.
Las inundaciones provocaron algunas pérdidas materiales, por fortuna no hubo desgracias mayores; sin embargo, la precipitación pluvial puso de manifiesto la falta de desagües y mantenimiento en las vías de canalización, según reflejaron medios escritos locales.
La cancha de Garcilazo fue uno de los lugares más afectados, el agua estancada mostraba más una laguna por la falta de desagüe en la zona del mercado San Antonio.
Otra cancha que también terminó inundada fue la de Valle Hermoso, hecha con césped sintético. La pista de motocross fue otro de los lugares aquejados a tal punto que se tuvo que suspender un torneo departamental.
En la calle Santa Elena, a una cuadra del nuevo edificio de la Facultad de Enfermería, en el barrio Santa Bárbara, el agua avanzó causando un lodazal que arrastró basura y sedimentos que taponearon las bocas de tormenta de toda la zona, según reclamaron los vecinos.
El diario local Correo del Sur también reportó que algunas unidades educativas quedaron damnificadas como la de San Juanillo desde donde se reportó inundación a causa del taponamiento de sumideros, informó el encargado de Infraestructura Externa y Emergencias de la Alcaldía de Sucre, Agustín Ramos.
En pleno centro de la ciudad, la avenida del Maestro se inundó durante la lluvia porque el agua no encontraba salida alguna.
La basura taponeó las bocas de tormenta en distintos puntos de la ciudad que terminó con sus calles hechas ríos. En varias zonas también se registraron cortes de luz a causa de la tormenta eléctrica.
Algunas motocicletas y vehículos pequeños fueron arrastrados por la fuerza del agua que habría afectado a casi una decena de puntos en la ciudad.
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