La Sala Penal Primera, presidida por Virginia Crespo, rechazó la apelación a la detención preventiva interpuesta por Marco Cámara, exdueño del club nocturno Katanas e imputado por el Ministerio Público por trata y tráfico de personas con fines de explotación sexual.
“En audiencia reservada, generaron una resolución objetiva y amplia para rechazar la apelación ante los inminentes riesgos procesales”, explicó Paola Barriga abogada de Noemí, denunciante e hija de Cámara.
En audiencia, la defensa de Cámara no logró desvirtuar los riesgos procesales de riesgo de fuga, por no tener familia ni domicilio conocido, además de la falta de un trabajo lícito.
La abogada demandante informó que la defensa acreditó un certificado de matrimonio con una brasileña que, a su juicio, va en contra del imputado porque genera alto peligro de fuga, tomando en cuenta que la esposa está implicada en reclutamiento y trata de personas.
Precisó que existen flujos migratorios de ambas personas que viajaron a Brasil, Paraguay, Venezuela, Cuba y otros países para reclutar adolecentes con la promesa de que en Bolivia serían modelos, pero “a la hora de la verdad, eran prostituidas en los locales de Cámara”.
Afirmó que en el delito que demanda, es absolutamente objetivo, tomando en cuenta que existe una víctima que declaró todos los vejámenes que sufrió en manos de Marcos Cámara y Gustavo Fernández.
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