Rap crea rimas con Cervantes

España (El País).- Don Quijote, Dulcinea o Sancho Panza han revivido la noche del pasado sábado en su versión más rapera. Se han convertido en los protagonistas de una pelea de gallos en la que las rimas venían inspiradas por las obras de Miguel de Cervantes.

Versos literarios que han sonado en el concurso Cervantes en rap, cuya segunda final se ha celebrado en la ciudad mexicana de Guanajuato.

Ha sido la última de las batallas de este concurso en cuya organización colabora El País, la Cadena Ser y W Radio y cuenta con el apoyo del Instituto Nacional de Artes Escénicas y de la Música y de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Un certamen celebrado en paralelo entre México y España en el que los más virtuosos rimando a Miguel de Cervantes de uno y otro lado del Atlántico se enfrentaron el pasado julio en el Festival de Teatro Clásico de Almagro de España y ahora lo han hecho en el Cervantino de Guanajuato. Tras la victoria del cantante BTA en la primera final, esta ha sido la revancha, en la que el mexicano Montiverzo se ha impuesto a los otros cinco concursantes.

La infatigable lucha de Don Quijote por alcanzar sus ideales ha inspirado los versos de Montiverzo. Este odóntologo, que en sus ratos libes se transforma en rapero, se sirve de la música para liberarse. Es su válvula de escape, “una especie de droga con la que evadirse de la realidad”, ha señalado.

Un género musical que ha servido para rejuvenecer a Cervantes en el 400 aniversario de su muerte. Fragmentos de las obras del dramaturgo y novelista castellano han quedado hiladas con las experiencias vitales de estos seis jóvenes raperos. Sus rupturas amorosas servían para evocar la Dulcinea y sus batallas políticas rimaban con la lucha de Don Quijote frente a aquellos molinos que había transformado en gigantes.

A ritmo de rap, Cervantes ha quedado retratado y actualizado. Una mirada desde el siglo XXI a este autor clásico que el festival pretende “acercar a los más jóvenes”, ha asegurado el director del certamen, Jorge Volpi. “Siempre me ha parecido terrible que los clásicos terminen por convertirse en una figura de mármol, lejana y, para colmo, obligatoria. De ahí que quisiéramos mostrar, además de la muy amplia tradición de obras que hay en torno a la figura de Cervantes, interpretaciones mexicanas actuales”.

Se aprovechan estos raperos de las metáforas que Miguel Cervantes dejó en su obra y de la universalidad de una literatura cargada de mensajes que podrían servir para interpretar el México de hoy. Se entrometen en sus novelas y también en sus versos, “cuya métrica se parece a la que el hip hop ha ido descubriendo de forma empírica”, ha señalado Alfredo Martínez ganador de la semifinal mexicana del certamen.

Las rimas de estos raperos consiguen hacer didáctico a este autor ante un público que no suele ser “demasiado asiduo a la lectura”, reconoce Martínez, que recibe el sobrenombre de Danger. Sus rimas relatan el paso de Cervantes por la cárcel, sus batallas contra los turcos o enumeran algunas de las muchas obras que publicó el autor castellano. Hacen lúdico a un escritor que el Festival Cervantino ha trasladado también al siglo XXI a través del teatro. Don Quijote acudirá a una fiesta de narcotraficantes del norte de México y Sancho Panza se convertirá en gobernador de un Estado en algunas de las obras que tiene programadas este festival.