Una noticia embarazosa

Pocas veces se anuncia noticias alegres en el Palacio Real de la plaza Murillo y por eso me sorprendió ver llegar hecha unas pascuas a mi corresponsal viniendo desde el Palacio Quemado, anunciándome que pronto nacería una guagua que aumentaría la población gobernante del país.

Aterrorizado por anuncios similares que convulsionaron al país, pensé inmediatamente en nuestro presidente Evo como protagonista de otra travesura, pero rápidamente la periodista valluna disipó mis malos pensamientos, aclarándome que en el Palacio Quemado se anunció en sesión de Gabinete que Claudia, la esposa del vicepresidente Álvaro, se hallaba en el feliz estado del embarazo, lo cual produjo júbilo en mi alma, aunque solamente la conozco a través de la televisión. Felicidades, señora y que tenga un feliz alumbramiento.

Cuando mi reportera Macacha me comunicó la noticia de que el vicepresidente Álvaro García Linera sería papá dentro de poco tiempo, no pude menos que sonreír macarrónicamente y decir para mis adentros: ¡¡¡cuántos libros habrá dejado de leer para embarazar a su guapa esposa!!!

Todos los pobladores de nuestro país sabemos y admiramos el número de libros que ha leído y lee este ciudadano excepcional, por lo cual me causa algo de tristeza deducir que tuvo que disminuir sus volúmenes de ilustración para engendrar a ese niño o niña que pronto nacerá, según trascendió en el Palacio Real de la plaza Murillo. ¡¡¡Los sacrificios que debe hacer un padre para engendrar, luego criar y después educar a un hijo o una hija!!!

Espero con ansias ver dentro de algunos meses fotografías en toda la prensa del flamante padre meciendo a su guaguacha y cambiándole de pañales con sus manos de revolucionario y terrorista, que le sirvieron hasta hace algunos años antes de llegar a la Vicepresidencia del Estado Plurinacional y Folklórico.

Felicito a los esposos García Linera, por el anuncio de que tendrán una guaguacha y le digo a la futura mamá que no se deje impresionar por los aires revolucionarios del marxista-comunista-maoísta-stalinista-putinista cuando llegue el momento de buscar un nombre para la guagua porque los libros que lee el Vicepresidente no sirven para tal cosa y es mejor acudir a un santoral.

Felicidades en nombre de Macacha y de… Paulovich.