Hacinamiento y mala alimentación son principales quejas contra guarderías

En un caso, unos 60 niños se ubican en un espacio para 20; en otro, los menores están arrinconados en un ambiente improvisado; también existen niños durmiendo en colchones tendidos en el patio.

El Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges) de La Paz realizó operativos sorpresa a centros infantiles (guarderías) privadas que ofrecen el servicio a menores de entre cero y cinco años de edad.

“Los centros infantiles se han convertidos en depósito de niños. Los papás muchas veces no saben dónde están dejando a sus pequeños. Ellos, por la necesidad de trabajar, sólo pagan un monto de dinero a las guarderías y ni siquiera verifican que tenga acreditación y como los niños son pequeños nunca se van a quejar”, indicó César Hidalgo, jefe de acreditación y control de Centros Infantiles del Sedeges.

Hidalgo puso como ejemplo que una de las inspecciones en el macrodistrito Centro, realizada la semana pasada, constató que un garaje de un domicilio particular fue acondicionado como un espacio de acogida y en ese ambiente se atendía a más de 30 niños, entre ellos bebés lactantes.

“En ese lugar había dos cunas y ahí mismo cambiaban pañales. Los pequeños no tenían un área de descanso ni salón de juegos. La dueña era la administradora, la psicóloga, la psicopedagoga, la nutricionista. Ella era todo y por tanto vulneraba todos los derechos de los infantes”, señaló.

De acuerdo a los registros del Sedeges existen 427 centros infantiles en todo el departamento; 227 de ellas están en proceso de acreditación y 21 con cierre temporal. Solamente 57 están “legalmente” establecidos, mientras que el resto 121 funcionan de forma ilegal.

Los datos muestran que en los últimos años las guarderías se han duplicado porque los dueños de estos centros ven en la actividad un negocio lucrativo.

De enero a la fecha, la Unidad de Acreditación y Control de Centros Infantiles recibió alrededor de 30 denuncias de padres de familia contra los administradores de esos centros infantiles.

De acuerdo a los datos del Sedeges, la mayoría de las quejas se refieren a temas de alimentación, ya que en las guarderías se cobra para las meriendas, que no siempre cumplen con estándares adecuados de nutrición.

Hidalgo dijo que las guarderías deben contar con ambientes separados para cada actividad, como descanso, psicomotricidad, lactancia, cunas, cocina y un espacio para merendar.