Gobierno debe fomentar la productividad interna

A raíz del amago de polémica surgida por la decisión del Gobierno de no pagar este año el segundo aguinaldo, por el bajo nivel de crecimiento económico, el analista Oscar Heredia en contacto con EL DIARIO pidió a las autoridades fomentar la competitividad y el desarrollo productivo e impedir que los productos extranjeros sigan ingresando al país de contrabando.

“Cuando se habla de forma genérica habría que entender que el Gobierno lo que tendría que hacer es fomentar la competitividad y la productividad, pero para ello no solamente se soluciona eliminando el segundo aguinaldo, sino controlando los productos internacionales que ingresan de contrabando. Habría que tomar una medida expresa al respecto”, declaró Heredia.

Indicó que los productos extranjeros, como los provenientes de China, ingresan al país con precios bajos, lo cual hace que el productor boliviano se encuentre en desventaja.

“Por tanto, tenemos el contrabando como competencia, productos baratos como competencia, presión impositiva como competencia”, agregó.

Identificó las “normas sociales” como un factor que no permiten a los empresarios ser competitivos, porque no les dejan reducir sus costos de producción.

EFECTO NEGATIVO

Puntualizó que debe hacerse una diferencia, puesto que hay actividades que, según los indicadores, aportan en gran porcentaje al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), como por ejemplo, hay pequeñas microempresas que crecen más del 1.5 por ciento.

“Si sacáramos toda esa lista de crecimiento que tienen más servicios seguramente la economía crecería a 2.2% según los estudios”, agregó.

De ese modo, Heredia considera que un doble aguinaldo en la realidad sí afectaba, porque el empresario privado, en vez de ahorrar 8.3 por ciento, cada mes, para pagar un aguinaldo debía prever el 16.6 por ciento.

Mientras que la administración pública para pagar el doble aguinaldo debería ahorrar entre 1.500 ó 1.200 millones de bolivianos. “Lógicamente, en la parte administrativa que no es productiva, tendría su efecto positivo, además, tendría que ser distribuida en nuevas inversiones, según lo que menciona el Gobierno. Sin embargo, hemos visto que la eficiencia y gestión del Gobierno no está acorde con las demás necesidades del pueblo boliviano”.

DESACELERACIÓN ECONÓMICA

De acuerdo al experto, la suspensión del pago del segundo aguinaldo es una muestra que hay una desaceleración en la economía boliviana, por razones internas y externas. Citó, como ejemplo, la globalización, los precios del petróleo del gas y la desaceleración en algunas economías mundiales hacen que no se demande tanta materia prima.

“En Bolivia vivimos exactamente en su mayoría de la explotación de los hidrocarburos, materia prima que ha crecido en la actualidad negativamente con 2.69 por ciento y los minerales tan sólo con el 0.3 por ciento, en tanto que la agropecuaria ha crecido 3.2 por ciento. Esto nos muestra que los sectores más importante decrecieron y las economías como los servicios, la administración pública, a partir de la inversión pública de consumo, las transferencias de recursos y lo servicios financieros han crecido al 6 por ciento, incluso al 8 por ciento, ese es el contexto económico nacional”, dijo.

FINALIDAD POLÍTICA

En el tema político, para Heredia, el pago del segundo aguinaldo siempre tuvo una finalidad política, generar adeptos al partido gobernante, generar votos o generar un reconocimiento al gobierno en función del crecimiento de la economía mundial.

Empero, señaló que los bolivianos se dieron cuenta con el tiempo que la bonanza económica del país duró una década, en función de que en su momento hubo exploración, encontrándose el gas natural. En ese tiempo, lo que se hizo es efectuar una inversión productiva, que permitió, a la vez, tener exploración y explotación de gas y de algunas otras materias primas, puesto que al final Bolivia vive de materias primas. “El Gobierno actual se olvidó de ello y, por tanto, no logra disponer de mayores ingresos”.