Con el paso de los años, la piel pierde su capacidad de retener humedad y de eliminar toxinas, y esto a su vez provoca que se torne menos suave, protegida y cada vez más seca por lo que aparecen las primeras arrugas. Sin embargo existen cuidados que contribuyen a devolver esa suavidad y elasticidad pérdida, regulando el PH corporal.
“Una piel bien hidratada tiene un PH equilibrado y, por lo general, es la piel normal. Sin embargo, existen casos en los cuales comienza a secarse a partir de los 30 años o antes dependiendo de cómo ha sido tratada si fue exfoliada, su rutina de limpieza y de hidratación recibida”, explica la cosmetóloga Claudia Ramírez.
La cosmetóloga asegura que se puede comenzar con la exfoliación (retirar células muertas) de la piel desde la niñez, pero teniendo el cuidado de utilizar productos adecuados para una dermis sensible. Por lo general, los niños tienen un PH perfecto en su piel, solo se debe cuidar la limpieza y la humectación necesaria luego de la misma.
“Cuando son bebés se debe tener cuidado al bañarlos en agua tibia a 40 grados centígrados y no más caliente, porque esto provoca que la piel se deshidrate y se vuelva seca. Hay que secarlos bien y aplicar una crema hidratante para que esa dermis conserve su hidratación y humectación necesarias”, afirma Ramírez.
La especialista recuerda que la piel tiene una protección extra en la dermis denominada “condriocitos” que se van eliminando cada 28 días. Pero ¿qué sucede cuando no hay una limpieza adecuada? Estos comienzan a pegarse en ciertas zonas del cuerpo como los codos y rodillas haciendo que la piel se escame y oscurezca por lo que es necesario una exfoliación y posterior a ella una emulsión para su humectación.
“Lo usual es que las personas se bañen con un jaboncillo acorde con el tipo de piel que se tenga, si son bebés o niños sin tanto químico, para los adultos existen un sinfín de jabones que son humectantes, pero lo que sucede es que muchas personas por la premura se duchan, se secan y salen de inmediato dejando a la piel desprotegida”, recuerda Ramírez.
Lo ideal es que cuando se realiza una limpieza profunda de la piel se modifica su PH y es necesario reponerlo con una loción o emulsión, porque de lo contrario se reseca y necesitará más exfoliaciones en la dermis para evitar que la piel quede desprotegida y pueda ingresar una bacteria que la contamine.
“La recomendación es realizarse una exfoliación corporal por lo menos dos veces por mes, no es bueno hacer más veces porque la misma piel va dejando condriocitos muertos que deben ser removidos con el aseo diario o baño corporal”, dice la cosmetóloga.
Generalmente, existen dos tipos de piel: la normal y la seca, solo algunas regiones pueden presentar cierta grasitud como el pecho y la espalda, en contadas ocasiones en el estómago. En la actualidad existen productos para estas pieles que cada vez son más sofisticados y más efectivos.
“Si existe mucha resequedad en la piel esta se va escamando y comienza a picar, para evitar esto se debe poner un poco de aceite de bebé en la piel antes de entrar en la ducha para salir hidratada y luego de secarnos enseguida aplicar una loción corporal acorde con el tipo de piel, debemos recordar que La Paz se caracteriza por tener un clima seco”, asegura Ramírez.
LIMPIEZA
Según Ramírez para bañar a los bebés hay jaboncillos especiales, porque su piel es muy delicada, en el caso de los niños aquellos que contengan glicerina. En cambio los adultos por lo general utilizan jaboncillos para la piel normal.
“La exfoliación con la famosa piedra pómez debe ser una vez a la semana, no es bueno exagerar haciéndolo todos los días porque se daña la piel quitando su humectación natural, en su lugar puede utilizarse el guante de crin que sirve para eliminar las células muertas y activa la circulación, además de geles de limpieza que no sean fuertes”, recomienda Claudia.
La cosmetóloga recuerda algunas formas de exfoliación caseras que contribuyen a retirar las células muertas de la piel como azúcar con sus gránulos o el yogurt que contiene ácido láctico, ambos procedimientos dejan la piel suave, son sencillos y pueden hacerse a bajo costo, pero una exfoliación profesional debe estar en manos de expertos para trabajar en zonas de difícil acceso para la persona.
“La piel envejece con el paso de los años y las zonas más afectadas son el rostro, cuello y piernas, por lo tanto requieren un cuidado integral que debería comenzar en la niñez. Y en la edad adulta recibir ayuda consumiendo colágeno, antioxidantes y mucho líquido”, finaliza la cosmetóloga.
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