Las calles de San Matías amanecieron ayer custodiadas por militares que realizaban patrullajes para brindar seguridad y resguardar la paz, después del asesinato de cuatro personas que participaban de una fiesta.
El comandante del Regimiento de Infantería 14 Florida de San Matías, Marco Antonio Guarachi, negó que se trate de una militarización, pero sí confirmó que se desplazaron al menos 10 patrullas a diversos puntos fronterizos en cumplimiento a instrucciones superiores.
Los controles se centraron en la requisa de motorizados, revisión de documentos de conductores y otros detalles para evitar que se sigan registrando hechos delictivos.
Según el jefe militar, los operativos continuarán a diario y se coordinará información con la Policía.
La medida de sacar a los militares a las calles para sentar presencia y brindar seguridad fue considerada positiva por los lugareños.
El alcalde de San Matías, Flavio López Olivarez, aplaudió la medida y afirmó que el trabajo de patrullaje es oportuno, especialmente, cuando se acercan las fiestas de fin de año y se incrementa el turismo desde Brasil y de otras partes del país.
El 21 de octubre cuando en la casa de Kenia Amaral se celebraba su fiesta de cumpleaños, sicarios asesinaron a balazos a los hermanos Julio Castedo Aranda (40) y Sergio Castedo Aranda (37), a Luver Velarde Kin (38) y a Julio César Zeballos Poñe (45). Tres personas quedaron heridas. Hasta la fecha la Policía no tiene pistas de los asesinos, pero se presume que el hecho tuvo su origen en un ajuste de cuentas.
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