El Gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC han alcanzado ayer sábado un nuevo acuerdo de paz para poner fin a una guerra de más de 50 años.
Poco más de un mes después de que los colombianos rechazaran en el plebiscito del 2 de octubre el pacto suscrito por el presidente, Juan Manuel Santos, y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, ambas partes han firmado un nuevo texto, que aún no es público y del que se desconoce el mecanismo por el que será refrendado. El pacto, aseguraron el Gobierno y las FARC, incorpora buena parte de los reclamos de los partidarios del “no” en la consulta.
El principal abanderado del “no”, el expresidente Álvaro Uribe, pidió a Santos que el nuevo texto no tenga alcance definitivo y sea puesto en conocimiento de todos los voceros del “no” y de las víctimas.
El propósito, aseguró Uribe después de reunirse de urgencia con Santos antes de que se hiciese público el acuerdo, es que cualquier observación o solicitud de modificación sea llevada a una nueva reunión con el equipo negociador del Gobierno.