Experiencias positivas en cursos de profesionalización en CEFIM

A la hora de medir el éxito de las egresadas del Instituto Técnico CEFIM, resulta clave indagar cuán buenas estudiantes fueron para ver los resultados que obtienen en su vida profesional, así afirmo la directora de Orientación del Instituto, Graciela Volpe.

Varios son los ejemplos en este centro educativo sin fines de lucro, creado hace 27 años, con el fin de encorajar a las mujeres a ser autónomas, afrontar desafíos y enseñarles la importancia del trabajo bien hecho, para mejorar sus condiciones de vida.

Uno de esos ejemplos es Lina Vargas Payromani, actualmente propietaria administradora de “Lina Cakes”, una pastelería de la zona de Mallasa, negocio donde económico le “va muy bien”. La empresaria sabía que le gustaba cocinar, pero en el CEFIM descubrió que debía “rajarse y echarle ganas” si quería sobresalir y ser una emprendedora.

Lina recuerda con gratitud y nostalgia las clases de “Mi propio negocio” y otras materias que le enseñaron que a los clientes, “no importa quién, se los trata con amabilidad” o a diseñar sus propios anuncios, crear ambiente de negocio y hasta manipulación de alimentos. ”Todo me sirvió, todo“, acota.

”Mi pasión era muy grande. Tenía el sueño del negocio propio. Aprendí también mucho en el hotel. Puse en práctica lo que me enseñaron. Los chefs nos insistían diciéndonos la frase mágica, “tú puedes”.