Hugo Mendieta Pedrazas
Desde hace aproximadamente dos semanas, los habitantes de la ciudad de La Paz sufren eventualmente un drástico racionamiento de agua potable. A este respecto, el presidente Evo Morales Aima, en conferencia de prensa con decreto en mano declaró Emergencia Nacional por Sequía, de forma memorista responsabilizó por este fenómeno al cambio climático. Lo extraño de esta declaración es que por primera vez no culpa al imperialismo norteamericano, a la derecha, o en su caso a la oposición, como nos tiene acostumbrados en su retórica diaria.
Bien, veamos muy rápidamente los orígenes y los principales actores de esta difícil situación que vivimos.
Epsas fue creada en cumplimento al Decreto Supremo 28.985, al inicio de la primera gestión del actual gobierno, cuyo objetivo central de acuerdo con los que la crearon fue: proveer de agua potable y saneamiento a la población de La Paz, El Alto y sus alrededores, a través de una gestión eficiente y sostenible con enfoque social. Para quienes lean este artículo, y para todos es un objetivo brillante. Pero, ¿en qué medida se dio cumplimiento a este meritorio objetivo? Tendríamos que ser sinceros y decir nada, ya que desde sus inicios Epsas ha tenido serios problemas: filtraciones, tardanza en la reparación de filtraciones, ruptura de cañerías madre, recordemos que cuando el Ing. Víctor Hugo Rico estuvo como Gerente de la empresa, la ciudad de La Paz sufrió un significativo racionamiento de agua por más de un mes, mal manejo del agua en las represas, desencuentro con AAPS y el Ministerio de Medio Ambiente y Agua, es más, nos faltaría espacio para citar las deficiencias.
Para la creación de la nueva empresa, se tuvo que liquidar Aguas del Illimani, con una millonaria indemnización a la Empresa Suez de Francia, de la cual creo no se tuvo quejas y si las hubo eran menores. En esta temática no tenemos que perder de vista que Epsas fue creada no para dar cumplimiento al objetivo central, sino con fines eminentemente políticos para beneficio y servicio del MAS. Para este efecto, designaron autoridades y personal de apoyo a sus correligionarios dotados con un pobre conocimiento del tema. En esta institución se debió nombrar profesionales en Hidráulica y/o Hidrología, o en su caso un Administrador de Empresas con conocimiento del tema, y personal de apoyo con una larga experiencia en el área.
También se debe señalar que los bolivianos no tenemos la cultura de cuidar y proteger nuestros recursos naturales, menos al agua, que en esencia es el elemento básico de la vida. Podemos vivir enfermos, sin alimentarnos, sin electricidad, pero sin agua no podemos vivir ni un día. Siempre en este tema, mucha gente dice “que llueva en el campo”, qué expresión de tontos, no saben que el agua, además de su función principal, sirve para purificar el aire, limpiar las calles, regar plazas y jardines y mucho más.
Para concluir, debo señalar que en nuestro medio algunos comunicadores y personas con un perfil profesional importante no conocen el caso, por ejemplo hablan de sequía en periodo seco y de focos de calor en periodo caluroso, otros dicen que si se cava pozos vamos a sacar agua salada, no saben que el agua salada solo hay en las grandes masas de agua (mares y lagos).
Hay que remarcar que la seguía no es de esta gestión, es del año pasado (gestión 2015/2016), en la cual se tuvo una precipitación pluvial de no más de 600 mm., unos 300 mm. menos que el promedio. Decir también que los expertos del sector indican que en La Paz hay más de 50 vertientes o fuentes de agua. En este punto habrá que indicar que eso se da en el periodo lluvioso en los meses de febrero o marzo, en este periodo seco la napa freática o nivel freático es alto, por tanto no están disponibles estos recursos hídricos.
Conclusión, no hay solución al tema, sigamos esperando al periodo lluvioso, aguantemos el racionamiento de agua por la incapacidad y falta de previsión en la construcción de más represas por parte de este gobierno, sigamos la doctrina Monroe que decía “América para los Americanos”, Bolivia para los Bolivianos.
Con el problema actual el MAS, como dice el CIAB-LA PAZ, ya no es el movimiento al socialismo sino el movimiento al desastre y al dolor.
El autor es Ing. Agr. Experto en Pastos y Forrajes.
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