Miles de personas acudieron anoche al estadio Atanasio Girardot de Medellín para rendir un homenaje póstumo al equipo de fútbol brasileño Chapecoense, la mayoría de cuya plantilla pereció en el accidente aéreo del pasado lunes, cuando se dirigían a esta ciudad del noroeste de Colombia.
En el comienzo del homenaje fueron soltadas en el centro del campo de juego 71 palomas que recuerdan a cada una de las personas fallecidas en el siniestro, en el que además hubo seis sobrevivientes.
El audio de la última comunicación entre la torre de control del aeropuerto de Medellín y el avión de la empresa Lamia, da cuenta de la falta de combustible y las fallas eléctricas que reportó antes de precipitarse a tierra, con un saldo de 71 muertos y seis sobrevivientes.