País inseguro

Brasil y Argentina han decidido reducir su dependencia del gas boliviano y para ello están disminuyendo los volúmenes de compra, porque el país no es una fuente segura de abastecimiento.

PETRÓLEO ORO ESTAÑO El precio del petróleo se dispara gracias a la reunión del pasado miércoles en la que la Organización de Países Exportadores de Petróleo acordó reducir su producción conjunta en 1,2 millones de barriles diarios a partir de enero del próximo año. La OPEP representa más de un tercio de la producción mundial que promedia 96 millones de barriles diarios. El recorte será difícil de verificar pero el efecto sobre el mercado se mantendrá hasta enero. Los rumores de que el gobierno chino ha recortado las autorizaciones para importar oro continúan y han afectado al mercado. Chine es el mayor comprador mundial, seguido de India. En India una sorpresiva prohibición del uso de los billetes de 500 y 1.000 rupias, que representan el 86% del circulante, ha frenado en seco la compra de oro justo en medio de la temporada de matrimonios que es tradicionalmente temporada alta para la compra de oro. El reciente bajón en el precio del estaño en el mercado internacional ha despertado el interés de los compradores que buscan comprar a un menor precio. Las ventas han aumentado y esto ayuda a fortalecer el precio. Las compras de metales industriales como el estaño y también cobre, zinc y aluminio se han acelerado debido a una iniciativa de China que busca aumentar sus reservas almacenadas. El cierre del año suele ser una temporada de fuertes compras..

El informe del Ministerio de Energía e Hidrocarburos dice que el 29 de noviembre Brasil pidió solamente 21,1 millones m3/d, cuando podía haber perdido 30 millones.

El 19 de noviembre, Argentina pidió solamente 11,4 MM m3/d, cuando podía haber pedido, según el contrato, 19,9 MM m3/d.

Si el proveedor es inseguro, el comprador debe tomar previsiones, comenzando por acomodar sus pedidos a las posibilidades del proveedor.

Argentina aplicó una multa a Bolivia por incumplimiento de los volúmenes comprometidos y las autoridades brasileñas saben que la producción boliviana está en crisis.

Ni Brasil ni Argentina pueden cruzarse de brazos y contentarse con aplicar multas a Bolivia: tienen que tomar previsiones para contar con proveedores seguros. Saben que la producción boliviana está en declinación y no pueden dejar sin gas a los consumidores. No son improvisados ni irresponsables.

Poco a poco, al parecer, esos dos países irán disminuyendo su dependencia del gas boliviano, hasta que puedan contar con fuentes alternativas seguras. En ese momento romperán el vínculo.

Por el momento, el problema de Bolivia es que debe reducir los volúmenes de producción para nivelarlos con la demanda, que es de 32 millones m3/d para los dos países vecinos, y de 10 millones para el consumo interno, totalizando 42 millones m3/d.

El problema adicional es que para producir la gasolina suficiente para el consumo interno, el volumen de extracción de gas debe ser de por lo menos 50 millones m3/d.

Lo que lleva a prever que el país podría verse obligado a importar mayores volúmenes de gasolina si es que la producción de gas siguiera restringida por la menor demanda de los vecinos.

Una operación que sería muy costosa de financiar si es que los ingresos por la exportación de gas siguieran cayendo, como parece inevitable por las imprevisiones de las autoridades.

Los ingresos por las exportaciones de gas natural habían sido calculados con grandes descensos debidos al menor precio, pero ahora hay que añadir el descenso provocado por la menor demanda de los vecinos.

El país debe prepararse para una caída adicional en los ingresos de la venta del gas, resultado de la pésima política petrolera aplicada desde 2006.

No se han descubiertos nuevos campos de gas desde el siglo pasado por falta de inversión en exploración. Las empresas extranjeras dejaron de invertir por temor a la falta de seguridad jurídica (nacionalización) y la empresa nacional dejó de invertir por deficiencias internas.

El gobierno dice que ninguna empresa china está explotando yacimientos mineros en las faldas del Illimani, como había denunciado el periodismo.	Pero el propio ministro de Minería, César Navarro, dijo que son cuatro las empresas que están explotando minerales en la zona, una con participación de capitales chinos.