Tarija (Agencias).- Luego de realizarse la reunión entre autoridades departamentales de Tarija con el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce Catacora; el secretario de Gestión institucional, Rubén Ardaya, indicó que los gobiernos municipales y subgobernaciones expresaron las exigencias para llegar a un acuerdo que permita conseguir un financiamiento porque no es la Gobernación la que será auxiliada sino el departamento.
“Esperamos que se pueda dar una respuesta positiva sobre el Plan de Rescate Financiero que se planteó hace meses atrás (…), para el día martes nuevamente solicitaremos otra reunión con el ministro para trabajar en la solución del problema”, resaltó Ardaya.
Asimismo, explicó que pese a las declaraciones que realizó el ministro sobre la ejecución presupuestaria del 56%, como Gobernación recibió a la fecha y hasta finales de año 400 millones de dolores menos de lo presupuestado, “Nuestra ejecución a nivel de la administración central es del 88%”.
Sin embargo sobre la transferencia que llegó el miércoles, se la fue conciliando para que a partir de la próxima semana, los saldos que se tenga para pagar las de deudas para los proyectos de continuidad y conclusión, dentro de 10 días el saldo que se tendrá en caja y banco no superaran el millón de bolivianos.
A pesar que el ministro indicó que realizar un fideicomiso sería una de las vías para solucionar la situación del departamento, Ardaya mencionó que evidentemente sí, sin embargo, mencionó que como Gobernación también se está trabajando sobre dos posibles vías que se las darán a conocer durante la siguiente semana. “Estamos trabajando para poder dar solución a la crisis por la que atraviesa el departamento para cancelar los compromisos que se tiene”, dijo.
CONTEXTO
En junio pasado, el gobernador de Tarija, Adrián Oliva, confirmó todos los rumores sobre el grave estado económico de la Gobernación, que tendrá para esta gestión un déficit de 1.519 millones de bolivianos, además de tener sus recursos comprometidos hasta el año 2018 por lo menos.
Oliva dijo que lo peor de la situación es que en los recursos que se hallan comprometidos por la Gobernación no se tomó en cuenta las necesidades de los diferentes sectores de la población, ni siquiera las necesidades más básicas de la sociedad tarijeña. Ante este panorama, aseguró que se tomarán tres medidas fundamentales para paliar la situación en la que se halla la Gobernación de Tarija.
La primera en llevar adelante una auditoria de la gestión que pasa del 2010 al 2015 para poder conocer cómo se han dispuesto esos recursos. La segunda no solo mirar atrás sino trabajar y actuar en consecuencia con la realidad que tiene el departamento y esto implica un plan de austeridad. Y la tercera tomar una serie de medidas de ajuste, “ que vamos a anunciar, vamos a trabajar en los próximos días para que el gobierno departamental pueda atender de manera urgente las obligaciones que tiene, pero además pueda racionalizar el gasto y priorizar las inversiones que el departamento requiere”, explicó el Gobernador.
Dijo, además, que debido a que los recursos están comprometidos por lo menos hasta el 2018 no solo se tendrá problemas para afrontar la coyuntura actual sino el futuro del departamento.
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