Beirut.- Los combates se reanudaron ayer en Alepo, situación que puso fin al alto el fuego declarado el martes en esa ciudad del norte de Siria, aunque continúan las negociaciones para desbloquear el acuerdo sobre la evacuación de los rebeldes y civiles, que debería haberse producido horas atrás.
Los enfrentamientos son intensos entre los efectivos gubernamentales y facciones rebeldes e islámicas en los puntos de contacto entre los barrios controlados por las autoridades y los que están en poder de la oposición, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, abrieron fuego de artillería contra los distritos dominados por los insurgentes, mientras que los rebeldes han lanzado cohetes contra los barrios en manos de las tropas gubernamentales en el oeste de la urbe. (EFE)