El Gobierno brasileño le rindió ayer un emotivo homenaje a autoridades y ciudadanos de Colombia que, de una u otra forma, participaron en la asistencia a las víctimas del accidente aéreo sufrido por el club de fútbol Chapecoense. Aunque fue extensivo a todo el pueblo colombiano, el homenaje se centró en Medellín, donde el pasado 28 de noviembre el avión en que viajaba el equipo brasileño sufrió un gravísimo accidente en el que murieron 71 de sus 77 ocupantes, entre ellos casi todos los jugadores del Chapecoense y una veintena de periodistas. “Las palabras nunca bastarán para agradecerle a Colombia y a cada uno de los colombianos ese ejemplo de solidaridad, de humanidad, que han dado para todos los pueblos y todos los países”, declaró Temer. La Orden de Río Branco fue concedida al alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga, y a otros cuatro funcionarios de esa ciudad, así como a la presentadora de TV Caracol Mónica Jaramillo y a Johan Alexis Ramírez Castro, de 15 años, quien ayudó a guiar a los socorristas al sitio del accidente. (EFE)