Según un informe publicado por el Foro de Periodismo Argentino en el marco del proyecto La Otra Trama, en los últimos 20 años, cientos de familias llegadas de Bolivia se fueron instalando en esta ciudad de Río Negro para elaborar ladrillos.
Hombres, mujeres y niños viven y trabajan en campamentos. Esta actividad productiva —que mueve más de 40 millones de pesos al año— se desarrolla en medio de la informalidad laboral, la precariedad habitacional y el trabajo infantil.
“El empuje de una comunidad que vino a la Argentina en búsqueda de mejores oportunidades está sujeta a una red de empleo no registrada que vulnera sus derechos”, dice parte del reportaje.
La investigación, que será reflejada en EL DIARIO en dos partes, gracias a la gentileza de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), presenta la vida en estas poblaciones, los patrones culturales que chocan con el pleno ejercicio de los derechos sociales y laborales, además del rol del Estado en ese contexto.