Con ojos bolivianos
El Cairo.- Durante este mes de diciembre han habido muchos actos terroristas alrededor del mundo, en Turquía donde murieron decenas en los alrededores de un estadio, en Egipto donde una bomba explotó y mató policías, días después la explosión de una bomba dentro de una capilla de la Catedral más grande de El Cairo, que terminó con la vida de también decenas de personas.
El mundo entero a través de medios de comunicación convencionales y de las redes sociales presenció asimismo cómo muchos combatientes rebeldes y civiles murieron en la violenta toma del Este de la ciudad de Alepo, Siria, por parte del ejército sirio con la ayuda de sus aliados rusos e iraníes.
Estos últimos días el asesinato del embajador ruso en Ankara, Turquía y el ataque a personas civiles en Berlín, Alemania, nos muestran a los billones de habitantes del planeta tierra que la violencia está en aumento, y quizás siempre estuvo presente, pero nunca fue tan visible como en estos tiempos.
Ver cadáveres de hombres, mujeres y niños, heridos graves y sobre todo mucha sangre derramada en conflictos armados y ataques terroristas alrededor del mundo, además de la violencia creciente en los países latinoamericanos, donde asesinatos, violaciones a mujeres seguidas de asesinatos despiadados, raptos, trata y tráfico, robos, corrupción, etc., tal vez estén causando un efecto de insensibilización en la gente, sí es verdad que hay más conciencia también y muchas personas demuestran su empatía apoyando determinadas causas de las que antes tenían desconocimiento.
El peligro es que la incesante presencia únicamente de noticias violentas, que tiene sin duda mayor cobertura mediática, a veces causa el efecto contrario a la concientización y genera mayor violencia, obviamente no sólo las noticias sino también las películas, vídeo juegos y programas televisivos; muchas veces incluso con o sin intención diversos medios de comunicación, gobernantes y la sociedad en general en sus comentarios en redes sociales incurren hasta en la apología de delitos, que es una conducta tipificada en casi todos los Códigos Penales del mundo, debido a que al elogiar públicamente determinadas conductas delictivas pueden causar que éstas se propaguen.
Hay muchas noticias positivas en todos los ámbitos que también deberían tener amplia cobertura, por ejemplo el conflicto entre Palestina e Israel, es una continua fuente de violencia, de vulneración de derechos humanos, empero hay gente que busca la paz entre esas dos naciones, hubo una gran movilización de mujeres musulmanas, judías y cristianas en Jerusalén en octubre pasado, donde miles marcharon por la paz, sin embargo esas noticias no generan ni la más mínima cobertura internacional.
Necesitamos noticias más esperanzadoras, en especial para criar nuevas generaciones con mayor conciencia de la importancia de la tolerancia y paz entre los seres humanos, necesitamos que los gobernantes del mundo se ocupen más del ser humano, de los valores morales de sus naciones, y no de la desenfrenada búsqueda de poder que solo genera seres humanos egoístas que buscan únicamente satisfacer necesidades consumistas, superficiales e irresponsables.
La autora es abogada boliviana, reside actualmente en El Cairo, Egipto.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |