Meditación con palabras positivas

Lo que está programado en nuestra mente subconsciente se manifiesta en nuestro mundo exterior como estados de avance o como estados de estancamiento; existen muchísimas personas en este mundo que viven en estados de estancamiento y no lo saben ni tienen la menor idea de por qué viven en esos estados.

Programar y reprogramar a nuestra mente subconsciente es relativamente fácil cuando se tiene la decisión de hacer cada ejercicio con regularidad y sobre todo, con actitud mental de buena voluntad.

Cada programación tiene su efecto y muchas de las cosas negativas de nuestra vida son resultado de programaciones inconscientes que nos han hecho nuestros padres, parientes y demás personas que han existido en nuestra historia personal; hay un detalle importante, nosotros mismos también nos hemos creado nuestras propias creencias limitantes.

Podemos comenzar a desprogramar nuestras creencias limitantes con la práctica de los ejercicios de repetición de palabras positivas para ir introduciendo en nuestro vocabulario habitual, palabras positivas, palabras constructivas y palabras capacitadoras con las cuales nuestro computador interno procesa mejor la información.

La repetición de frases sueltas tiene gran poder para introducir en nuestra mente subconsciente comandos nuevos y liberadores, algunas de esas palabras son: “siempre puedo”, ”aprendo a tomar decisiones por escrito”, “cuando cuento del uno al tres me pongo en acción”.

Aparte de las frases anteriores podemos ejercitar con estas otras palabras para lograr otros efectos:”paz, orden y fuerza en mi mente”. Se las debe repetir durante cinco minutos tres o cuatro veces al día durante una semana y comprobar con la propia conciencia cómo el proceso pensante se ha vuelto mucho más simple, más claro, más lúcido y más amoroso.

Cada programación que hagamos logrará que nuestro subconsciente produzca una conducta nueva, amorosa y constructiva que beneficiará a la persona y a la familia también.

Vamos al ejercicio: Sentado en cualquier lugar tranquilo con los ojos cerrados repita en voz alta durante diez minutos: “paz, orden y fuerza en mi mente” y una vez que pasen los cinco minutos saldrá de ese estado con una nueva y maravillosa sensación de que todo se está ordenando en su mente, en su vida y en sus asuntos.

Debe recordar que la medición del tiempo es importante, use su celular o un reloj cualquiera para verificar que sean los cinco minutos reales de repetición verbal; si salen bostezos y pequeñas lágrimas, la programación ha sido instalada con éxito; nos vemos en el artículo de mañana.

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