Brigadistas vigilan acciones de pandillas

El programa de Brigadas Escolares permite que estudiantes alteños puedan convertirse en un medio de control y vigilancia para pandillas en diferentes zonas de El Alto.

Ante esto, padres de familia de unidades educativas ubicadas en zonas como Ciudad Satélite y Villa Dolores, aplaudieron la iniciativa de sus hijos de ser parte de estas brigadas, donde además acceden a información sobre distintos temas de seguridad ciudadana.

Gloría Mamani, madre de familia, aguarda con ansias el inicio de este tipo de capacitaciones durante la próxima gestión, aplicadas por la Policía Boliviana, con supervisión de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, perteneciente al Municipio.

“Mis dos hijos están en la brigada escolar y antes de la conclusión de clases iban cada sábado. El mayor estaba encaminándose al parecer con malos amigos y ahora es más respetuoso, prefiere evitar esos grupos que se crean en la zona y mantener sus amigos de las brigadas y del colegio, quienes tienen las mismas inquietudes, mientras que se dio cuenta que a esos grupos solo les interesa beber, si bien cuentan sus problemas y todo, pero su única solución es consumir bebidas alcohólicas y estar con chicas”, explica Mamani, vecina de Satélite.

Como Gloria, cerca de 12 padres de familia son quienes participan de los actos donde sus hijos eran capacitados al interior del Regimiento 3, tarea que esperan sea retomada en la presente gestión.

“Si a él le gusta tanto este tipo de actividad, creo que se postulará a ser policía o lo que él elija. Estoy orgulloso de que responda por iniciativa propia a estas actividades, antes de que esté con otra gente de la zona, conformando pandillas o vagando en las calles como lo suelen hacer ahora, consumiendo bebidas alcohólicas y echando a perder si juventud, por eso lo apoyo”, explica Clemente Torres, padre de familia de uno de los brigadistas.

Para los padres de familia, la creación de brigadas escolares debiera extenderse a cada distrito municipal, con la finalidad de que los escolares, tengan un lugar de apoyo, capacitación y formación tanto en seguridad ciudadana, defensa personal como otros conocimientos, con una mejor orientación personalizada que les ayude a desempeñar sus labores educativas y personales, aspecto que debiera estar apoyado económica y técnicamente por el Municipio para que dichos centros sean permanentes para varias generaciones.

El pasado año, la Secretaría de Seguridad Ciudadana realizó la entrega de chalecos, tarea que esperan que este año nuevamente se repita ante la posibilidad de que exista una mayor demanda de escolares que busquen ser parte de una organización que les permita tener nuevas actividades y ocupaciones.

ANÁLISIS

De acuerdo con Guillermo Gutiérrez, psicólogo de profesión, las pandillas en la ciudad de El Alto, son resultado de la invisibilidad en la que se encuentran los niños, niñas, y adolescentes, quienes no son tomados en cuenta por autoridades de Gobierno, por políticas públicas y son rechazados incluso por su familia.

“Las pandillas, desde los estudios efectuados en América Latina y Norteamérica, representan a la organización espontánea de niños y jóvenes, quienes buscan un espacio para ser visibles en su sociedad, su barrio y su familia, el cual está compuesto por el mundo adulto, quienes, a pesar de haber sido en algún momento componentes de esas organizaciones, prefieren no trabajar en beneficio de dichos grupos sociales y simplemente los relegan” afirmó.

Para Gutiérrez, las pandillas buscan ser reconocidas por su entorno social y hasta familiar, captando entre sus componentes a sus iguales en edad, problemática y hasta situación socioeconómica.

“Muchas de las Pandillas, si bien tiene su origen en el barrio o en establecimiento escolares, en una primera instancia no están relacionados a actividades ilícitas, todo dependerá de los líderes que lleguen a dichos grupos juveniles quienes serán los que en última instancia influyan en el resto, para que determinada pandilla se convierta en un factor de riesgo social o presencia social”, explicó.