Aprehenden a los dos policías escoltas del exdueño de Katanas

Freddy A. y Jacinto F., suboficiales del Batallón de seguridad privada de Santa Cruz, fueron aprehendidos en el caso de Trata y Tráfico de personas, que se sigue contra Marco Cámara, el exdueño del local nocturno Katanas, informó el fiscal Marco García.

Los efectivos fueron aprehendidos la noche del martes luego de que se presentaron ante la Fiscalía para prestar su declaración informativa en relación al delito de trata y tráfico, “se ha dispuesto la aprehensión de los mismos y van a ser puestos a conocimiento y consideración del juez cautelar”, señaló Vargas que además adelantó que se pedirá la detención preventiva de ambos.

El fiscal indicó que el grado de participación de los acusados se definirá en audiencia cautelar de los mismos, quienes fueron imputados por los delitos de trata de personas, asociación delictuosa y organización criminal.

Por su parte, Noemí Cámara, quien denunció el caso, manifestó que esos dos efectivos policiales trabajaban para su padre, durante tres años, y lo acompañaban al aeropuerto para el traslado de mujeres a las que obligaban a trabajar en el Katanas como damas de compañía, y también se encargaban de amedrentar al personal y a las chicas que eran prostituidas.

“Estas personas trabajaban por más de tres años con el señor Cámara y eran los que se encargaban de hacer los contactos con las personas que él necesitaba para que tenga protección, también se encargaban de amedrentar al personal  así como a las chicas”, detalló. 

La denunciante indicó que hay más personas implicadas en esa “red” de trata y tráfico, que manejaba su padre, y que con las investigaciones del Ministerio Público se irá descubriendo la verdad histórica de los hechos.

La hija del ahora detenido en el penal de San Pedro asegura que fueron las malas actuaciones de la primera fiscal Mónica de La Riva, lo que permitió que los actos investigativos se retrasen y recién ahora se retomen la citación a los policías, que afirma se hacían pasar por administradores de los varios locales que controlaba su padre.