Registro
Las fuerzas oficialistas que encabeza el presidente Morales se preparan para una segunda fase de la estrategia para desconocer la prohibición de una re3 (re-re-reelección) zanjada en el referéndum del año pasado. Tras no lograr el martes una movilización contundente en el aniversario de la consulta del 21 de febrero del año pasado, los analistas creen que el oficialismo ha quedado en un sendero deslucido y salvo sorpresas deberá continuar en una ruta empinada y espinosa para revertir la antipatía que provoca la re3.
Todas las concentraciones oficialistas suelen estar marcadas por el escepticismo, pues hace mucho que dejaron de ser termómetro de respaldo o de simpatía. Cargan la sospecha odiosa de que muchos de sus participantes son obligados y que se consideran humillados al tener que asistir a actos con los que en conciencia discordan. El referéndum del año pasado confirió a la antipatía por la re3 un sello nacional de legalidad y, para los observadores, los esfuerzos para neutralizarla lucen como un disparo en el pie oficialista.
El próximo paso de la estrategia re3, dicen, sería la renuncia presidencial seis meses antes de los comicios de 2019 o un debate legislativo sobre la modificación de la CPE. Ambas opciones subrayan las sospechas gigantes que de ellas emergen entre quienes observan la vida política nacional. En el fondo, puede tratarse de extender en el tiempo los beneficios del poder más que de garantizar las supuestas bondades de una causa. En todo caso, en Bolivia y en otras latitudes, los líderes pueden temer la perspectiva de verse desprovistos de la coraza del poder y en algún momento enfrentar a la justicia, muchas de cuyas impropiedades ellos ayudaron a forjar.
El ejemplo más reciente es el de Alejandro Toledo, ahora con paradero desconocido y perseguido por la justicia peruana acusado de recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. En ese mismo círculo de la fortuna revertida están Cristina Fernández, en Argentina, y Lula da Silva y Dilma Rousseff en Brasil.
Solo una generación atrás está el gran destape en los ex países socialistas, donde se implantó el Gulag del que líderes del Socialismo Siglo 21 copiaron algunos métodos y sacrificaron mucho en aras de un proceso que decían que acabaría en un Edén, ahora cada vez más desdibujado. Cubanos y venezolanos pueden describirlo mejor.
Para algunos de los líderes que resisten normas democráticas es una pesadilla recordar el destino del dictador rumano Nicolás Ceausescu, quien presidió el régimen más represivo de Europa del Este durante la Guerra Fría y acabó en la Navidad de 1989 junto a su esposa Elena frente a un pelotón de fusilamiento inspirado en las mismas normas legales que su régimen estableció.
Por todo lo leído y escuchado estos días, puede concluirse que la reaparición fugaz en las pantallas de televisión de la ex pareja del presidente Morales no fue ninguna ayuda para despejar las dudas y el bochorno que cundieron en todo el país el año pasado. El gobierno decidió bautizar la jornada como “El día de la mentira”, en tanto que los que rechazan la re3 le dieron una significación cívica: Jornada ciudadana. Los propugnadores de la primera no repararon en una premisa fundamental en toda frase propagandística: evitar su distorsión fácil. Quienes transformaron el lema en “la mentira del día” encontraron una fórmula embarazosa para los defensores de la re3.
Los 20 minutos de la presentación -declaración individual, no entrevista- con un formato reprochable mostraron para muchos un caso de servidumbre humana y en nada cambiaron la percepción mayoritaria de una mujer aplastada por el poder y víctima de sus propias veleidades.
http://haroldolmos.wordpress.com
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
| |