Ministro convenció en Viena

Cada vez estoy más convencido de que tener a mi discípula periodística en el Palacio Real de la plaza Murillo es un acierto de ambos, pues lo más importante que sucede en el ámbito gubernativo llega al conocimiento de esta columna y con ello a innumerables lectores; esta consideración se vio reforzada cuando la cholita cochabambina pudo brindarme noticias primiciales acerca del Ministro de Gobierno en “misión imposible” de convencer a la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas, que funciona en Viena, además del trabajo de apoyo que recibió éste de nuestros amigos yatiris Kalimán, Mandraque y Titirico. La autoridad se había desplazado a la capital de Austria, como hacen todos los ministros que salen al exterior a luchar por nuestra patria, muchas veces calumniada por órdenes del imperialismo norteamericano.

Mi corresponsal en el sitio clave del quehacer gubernamental fue la primera en darme a conocer la habilidad e inteligencia del Dr. Carlos Romero, quien en su tarea ímproba de convencer a extraños de que Bolivia lucha contra los estupefacientes, declaró que la coca producida en Yungas y el Chapare es consumida en territorio boliviano, pues citó que… de cada diez bolivianos, siete masticamos la hoja sagrada a tal punto que entre nosotros nos gloriamos de ser llamados “chucutas pico verdes”.

Tratando de colaborar al Dr. Romero, uno de nuestros yatiris se colocó al lado de la estatua del músico violinista Johann Strauss, que adorna uno de los parques vieneses más conocidos y que resultó amparando su papel de “pajpacu”, aun sin saber nada del idioma de los naturales de esa ciudad. La actuación del pajpacu fue una revelación periodística de mi comadritay, pues jamás imaginé a un yatiri convenciendo al mundo de que en Bolivia no se producirá mayor cantidad de estupefacientes, pues inteligentemente el Gobierno dispuso el control telefónico de todos los ciudadanos bolivianos y recompensas para todos los “acusetes” que denuncien actividades que tengan que ver con la “pichicata”.

El violista Strauss agradeció la mención de la palabra “pichicato”, que suena como “pizzicato”, técnica con las cuerdas que los violinistas usan para la mejor ejecución de sus conciertos.

Agradecí a Macacha por la información completa acerca de una misión boliviana en el extranjero.