La activista boliviana Tania Nava cree que la reforma del sistema penal con la que se pretende ampliar las causales para la interrupción voluntaria del embarazo en Bolivia es un paso, pero no un “buen mecanismo” para la despenalización total del aborto y para hacer respetar “la autonomía de las mujeres”.
“Indudablemente es un paso más, pero creo que no es un buen mecanismo”, dijo la presidenta de la asociación Católicas por el Derecho a Decidir-Bolivia en una entrevista con Efe.
Además de las causales incluidas en una sentencia del Tribunal Constitucional de 2014 –la salud y riesgo de la madre o del feto y el embarazo por violación o incesto–, el artículo de la reforma penal que analiza el Parlamento busca despenalizar, entre otros casos, el aborto en situaciones de extrema pobreza.
En Bolivia, fuera de los motivos estipulados por la ley, el aborto está prohibido y se calcula que se practican 185 abortos clandestinos al día. (EFE)