¿Se desintegrará la Unión Europea?

Al cumplir treinta años de existencia, la Unión Europea empezó a presentar algunos resquebrajamientos que causaron preocupación entre los países miembros. Pero, ahora que se vislumbra una desintegración de ese sistema económico-político, la preocupación ha pasado a una etapa de angustia que se acentúa día que pasa.

Los problemas de este proyecto internacional que en sus primeros tiempos se pensó que sería una panacea para los problemas económicos y políticos, se han agravado en tal medida que se teme que ese organismo se desintegre y se retorne a fojas cero. Es decir que cada una de las naciones del viejo continente resuelva sus dificultades internas y externas en forma independiente, en especial en lo que se refiere a asuntos económicos, como el referido a la moneda, así como enfrentar cuestiones internacionales como el islamismo, el terrorismo y la globalización.

La debilitación de la Unión Europea se presentó con una serie de aspectos como la crisis del euro y la migración, asuntos a los que se sumaron la impactante decisión de Gran Bretaña a favor del brexit, la propuesta revisionista del presidente Donald Trump en Estados Unidos, así como la nueva orientación política del presidente ruso Vladimir Putin. Por si fuera poco, se empezaron a presentar manifestaciones pidiendo separarse de la unión Europea, en Holanda, Francia, Alemania, Grecia, Austria, la República Checa e inclusive Italia.

Esa suma de dificultades ha hecho ver a la Unión Europea en una situación crítica, de tal magnitud que inclusive la candidata presidencial francesa Marine Le Pen, líder del Frente Nacional de Francia, llegó a expresar que “la Unión Europea está muerta, pero aún no sabe”, opinión con la que discrepan algunos políticos, en sentido de que ese extremo será imposible.

Los síntomas de malestar que presentaba la Unión Europea empeoraron con la política revisionista del nuevo Presidente estadounidense, no por su política de construir muros y tampoco porque los europeos estén enamorados de la globalización, sino por los violentos golpes de timón que Trump está dando a Estados Unidos, aunque es todavía muy temprano para adoptar una opinión definitiva. En todo caso, los políticos europeos dieron un viraje en sus estrategias y mientras unos se radicalizaron en su visión apocalíptica del mundo y con viejas opiniones, otros se transformaron, como la candidata francesa Le Pen, que de la noche al día se mostró contraria a la globalización y partidaria del aislamiento de Francia ante la UE.

En todo caso, parece que todavía la Unión Europea tiene posibilidades de sobrevivir, aunque Marine Le Pen obtenga la victoria en Francia y más si en el asunto del brexit se alcanzara algún arreglo en Gran Bretaña. En esa forma, la desintegración podría ser evitada.