La mayoría son por mantenimiento
La zona Norte de la urbe paceña se encuentra en medio de un deprimente abandono en equipamiento urbano y desatención. En los últimos años soporta recurrentes cortes de energía eléctrica, que según los vecinos en su mayoría son por mantenimiento técnico.
Un recorrido por la zona evidenció cortes de energías eléctrica que en algunos son notificados por la operadora DeLaPaz, cuando se trata de mantenimiento planificado, pero también ocurren cortes intempestivos que más de un vecino ha tenido que lamentar el corte en térmicos y artefactos electrodomésticos.
Sonia Andrea C., vecina de la zona Norte, relata que el jueves pasado, al promediar las 14.00, cuando retornaba de su trabajo se encontró con gran cantidad de agua en el piso a causa de daños ocasionados por el corte de energía eléctrica para realizar trabajos públicos por los que no son comunicados.
“Veo tanta agua en el piso que me he asustado. Prendo los interruptores y no tenía energía eléctrica hasta pasadas las 17.30 y no tomamos previsiones por falta de comunicación. En otra oportunidad, mi hijo en la ducha y un corte de energía intempestivo que hizo saltar el térmico”, refirió.
Señaló que los vecinos se quejan por la falta de luminarias públicas, especialmente en las calles aledañas a la plaza Riosinho, identificada como “zona roja”, por la incidencia de hechos delictivos que se registran en el lugar.
De igual manera, la dueña de una tienda de barrio en la avenida Armentia, Flor M., reclama por el colocado de los cables de energía eléctrica a tan baja altura que en reiteradas oportunidades ocurrieron accidentes con camiones de alto tonelaje, “más de uno arrastró los cables por lo bajos que están y han ocasionado cortes de energía eléctrica”, reclamó.
CALLES DETERIORADAS
A estas deficiencias se suman las calles en mal estado y aceras deterioradas que exponen a los transeúntes tropezones y caídas, por los huecos intermitentes y algunos trabajos que no se han concluido, dejando peligrosas zanjas.
Además de este riesgo, se advierte peligro de accidentes de tráfico vehicular para los escolares, toda vez que en la avenida Armentia no existe ni un “lomo de pez” que indique reducir la velocidad para que los niños puedan cruzar la calle.
Por otra parte, a pesar de que en la zona Norte en reiteradas oportunidades les suspendieron el suministro de agua potable, al igual que otras zonas son sorprendidos con injustificados incrementos por el suministro de agua potable.
Es el caso de Julieta Villafuete, que hace meses vive en el lugar y nunca antes había facturado montos superiores a Bs 100 por el suministro del líquido vital, ahora debe pagar Bs 300 sin que ninguna autoridad imponga orden.
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