Actitud insólita

Con una actitud realmente insólita, el Rectorado de la UMSS en Cochabamba ha solicitado el desalojo de la oficina céntrica que ocupaba el Cedib. El es una organización civil sin ánimo de lucro que brinda desde 1970 servicios de información y consulta documental sobre temas sociales de Bolivia y América Latina con una mirada crítica.

Una información más detallada, según su propia página: “Es una biblioteca, cuyo Fondo Hemerográfico incluye más de 8 millones de noticias clasificadas por tema, desde los años 70 hasta la actualidad. La biblioteca, especializada en temas sociales, cuenta con más de 60.000 títulos en distintos formatos y soportes. Por este trabajo ha sido declarado Patrimonio Documental del Municipio de Cochabamba”.

Es un centro de investigación que genera conocimiento e información crítica para la defensa de los recursos naturales, frente a la problemática urbana, así como de temas de coyuntura del país y la región. Proporciona insumos con los que se puede generar una opinión crítica mejor informada, apoyando una cultura de defensa de los derechos humanos a través del derecho a la información.

El Cedib brinda servicios de información y consulta documental en sala y por pedido. Se puede solicitar su búsqueda especificando el tema y el periodo. El céntrico salón se puede alquilar para eventos. Y en su librería social, La Libre, se puede encontrar una amplia oferta de materiales de temas sociales y mucho más.

Con esas funciones y características, la opinión nacional se ha visto sorprendida con la notificación que le hace la UMSS, para que desaloje estas instalaciones, a lo cual se ha sumado la Federación Universitaria Local para que el Fondo documental sea transferido a manos de los estudiantes y docentes de San Simón. Rectorado y FUL parecen olvidar que el papel de una universidad es trabajar por el desarrollo del conocimiento, y la investigación.

En contraste con esa actitud, con responsabilidad pública el rector de la UMSA, Waldo Albarracín, coordinando con el alcalde de La Paz, Luis Revilla, plantea que este valioso patrimonio sea transferido a la UMSA, para lo cual se estaría tratando de ubicar un predio que sirva para los objetivos y propósitos que presta el Cedib en Cochabamba y con servicio a nivel nacional.

Un matutino local en la edición dominical presenta 15 razones por las cuales hay que preservar este patrimonio. La primera es totalmente clara: el Cedib guarda 11.042.718 artículos aproximadamente, clasificados en 900 temas. También conserva 3.006.035 artículos en una base de datos. Siguen otras 13 razones, tan importantes como las dos anteriores.

Frente al oscurantismo con el que actúan las autoridades de la UMSS, es encomiable y valiosa la oferta de la UMSA, que responde adecuadamente a un tema que ayuda a preservar el conocimiento y su difusión.

Como ciudadano que ha tenido la suerte de lograr un alto nivel profesional en varias universidades, felicito a los señores Albarracín y Revilla y expreso mi más enérgica censura a la actitud anticultural y anticientífica de los personeros cochabambinos y de la FUL de esa universidad.