La producción de castaña podría desaparecer ante el incremento de la deforestación y ocupación de bosques y selvas, advirtió el analista y experto en economía Humberto Vacaflor.
La viceministra de Medio Ambiente, Cinthia Silva, reconoció que existe una importante caída en la producción de castaña, aproximadamente en 40 por ciento, y aclaró que esta baja se debe a los efectos climáticos, que inciden en los cultivos de la planta.
Entretanto, Vacaflor recordó que hace 30 años Brasil también enfrentó el problema de la desaparición de la castaña en su país, como consecuencia de la desforestación, originada por la destrucción y ocupación de la selva, entonces Bolivia y Perú quedaron como únicos productores de la misma.
“En los últimos 10 años el Gobierno, por razones políticas, permitió diferentes asentamientos en Pando y Beni, razón por la que se presenta la desforestación y ocupación de tierras, en sectores donde se cultivaba la castaña. El comercio indiscriminado de madera ha comprometido extensas zonas de áreas boscosas y selvas, cuyas consecuencias están generando la desaparición de (este producto)”, indicó.