Bojayá (Colombia).- La población del municipio colombiano de Bojayá, en el selvático departamento del Chocó, inició ayer con una silenciosa marcha de antorchas las conmemoraciones por la masacre que hace 15 años perpetró las FARC y que dejó entre 79 y 119 muertos.
Hoy se realizarán los actos centrales en recuerdo de los fallecidos el 2 de mayo de 2002, que murieron cuando las FARC, en medio de un combate con las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), lanzaron un explosivo contra la iglesia en que se refugiaban los habitantes de la localidad.
En conmemoración de este fatídico suceso que sacudió la Colombia de principios de siglo, una apesadumbrada comitiva compuesta por familiares de los fallecidos, supervivientes de la masacre y líderes locales recorrió las calles de esta localidad a las orillas del río Atrato después de participar en una misa.
En cuatro filas, vestidos de blanco y murmurando cánticos tradicionales de hondas raíces africanas, recorrieron la localidad recordando a sus muertos. (EFE)