El Departamento de Educación de Puerto Rico anunció ayer el cierre de 184 escuelas al finalizar este año escolar, con el fin de ahorrar costos en medio de la aguda crisis económica en la que está sumido el territorio estadounidense.
La decisión se da días después de que la isla se acogiera a un mecanismo similar a la quiebra para reestructurar una deuda de más de 70,000 millones de dólares.
Puerto Rico cuenta actualmente con 1,297 escuelas públicas en las que estudian cerca de 365,000 estudiantes. Serán cerradas escuelas con hasta 300 estudiantes, los que serán reubicados. Lo mismo sucederá con los 2,088 maestros que trabajaban en ellas.
La decisión se dio en medio de la prolongada recesión que atraviesa la isla, que lleva a cuestas un déficit de 50,000 millones de dólares y se quedó sin dinero para honrar el pago de sus bonos.