Tendremos mejores leyes

Sorpresivamente recibí la visita de mis tíos Huebastián y Pelópidas, quienes nos hallaron en pleno trabajo periodístico a mi corresponsal y a mí, pues recién nos habíamos enterado de que los asambleístas del Legislativo habían sido beneficiados con el aumento de sus dietas parlamentarias, algo que disgustó a los pobres de todo el país que somos muchos.

Mi tío Pelópidas nos sorprendió con su aprobación ipso-pucho del beneficio que recibirán los padres de la patria, aunque él prefirió llamarlos “papitos de los tontos”, explicándonos que al estar bien pagados producirán mejores leyes para el pueblo de Bolivia.

Como de costumbre, Huebastián se opuso a la opinión de su hermano, obligando a éste a justificar su posición, él dijo entonces: “pienso y sostengo que el gobierno presidido por Evo Morales mejorará el sistema judicial boliviano para que la justicia sea más equitativa y eficaz mediante la designación de nuevos representantes de la ley y esta será la oportunidad para que el pueblo elija a jueces y magistrados probos, los que irán apareciendo como por ensalmo o sea milagrosamente. Por esto, los asambleístas necesitan ser mejor pagados para cumplir con la tarea de asignar y calificar a los mejores hombres para que después sean ratificados por nuestro voto”.

Esto produjo la irritación de mi tío Huebastián, quien le dijo a su hermano: “no seas, pues, Pelópidas, ¿crees tú que los hombres probos y justos aparecerán de la noche a la mañana?”.

Pelópidas dijo a su hermano: “no seas, pues, Huebastián, lo que seguramente conseguiremos al final de este proceso es que los flamantes jueces reformen la Constitución para abrir camino a la rerereelección de Evo”, posibilidad que gustó a mi discípula periodística, quien tímidamente dijo a mis parientes: “Señores, sus sabias palabras han abierto mis chascañawis y veo un futuro promisorio con la continuidad del presidente vitalicio Evo, por muchos años, lo que permitirá que yo siga trabajando como corresponsal de don Paulovich en el Palacio Real de la plaza Murillo, donde haré valer mis influencias para que dentro de un tiempo podamos contar entre nuestros legisladores a don Pelópidas y a don Huebastián, como dignos representantes de la inteligencia boliviana”.

Palabras que concluyeron con un abrazo fraternal entre los presentes, todo gracias al aumento decretado por el gobierno a sus parlamentarios.