Aun cuando Bolivia llegara a vender 5.000 toneladas métricas de carbonato de litio por año al iniciarse el millonario proyecto en el Salar de Uyuni, entre 2019 y 2020, el ingreso anual bordearía apenas 75 millones de dólares y el monto de las regalías departamentales para Potosí no llegaría a 1,3 millones de dólares anuales
Eso sumado a otro poco más de un millón de dólares en beneficios regionales que dejaría la producción anual oficialmente anunciada de 350 mil toneladas métricas (TM) de cloruro de potasio, también por valor de adicionales 75millones de dólares (MM/$us),los nuevos ingresos potosinos por recursos evaporíticos hacia el año 2020 no superarían, 2.5 millones de dólares anuales.
Las cifras, se desprenden de recientes estimaciones formuladas por el analista, Juan Carlos Zuleta que contrastan con los 1.500 MM/$usen ingresos brutos calculados los últimos meses por el viceministro de Altas Tecnologías Energéticas, Alberto Echazú y el gerente de la nueva empresa estatal, Yacimientos Bolivianos del Litio (YLB), Juan Carlos Montenegro.
Con todo, bajo la impronta de la compleja legislación actual para regalías mineras que privilegiaría al centralismo y las dificultades que supone su complicada aplicación, en el mejor de los casos el beneficio potosino por cada 1.500 MM/$us anuales rozaría 24 millones de dólares al año, quizá después del año 2020.
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