Campaña para niñez y adolescencia

Se realizó ayer el lanzamiento de la campaña denominada “Solidatón”, que busca sensibilizar a la población en su conjunto, incluyendo instituciones gubernamentales, públicas y privadas, para recaudar medio millón de dólares destinados a socorrer de manera sostenible a la niñez y adolescencia en situación de vulnerabilidad.

La campaña “Solidatón, un arcoíris de esperanza” busca recaudar recursos que permitan ayudar de manera constante a aquella población joven e infantil que por motivos de orfandad, abandono, vida callejera, extrema pobreza o víctima de violencia, se encuentre en situaciones precarias y de necesidad.

La campaña es promovida por la Fundación Arco Iris, organización que atiende a más de 6.200 niños y jóvenes, y que brinda apoyo a la sociedad bajo tres componentes: proyectos sociales, como hogares de acogida; proyectos de salud, dirigidos a infantes en situación de calle; y unidades productivas, que son espacios dirigidas a la inclusión laboral.

14 PROYECTOS

“Solidatón, un arcoíris de esperanza”, se propone beneficiar a 15 proyectos y 8 hogares; la campaña fue lanzada ayer y concluirá el próximo 25 de junio, en una jornada solidaria pública, cuya acción contará con el apoyo de diferentes grupos musicales.

Se espera generar sensibilidad en la población para que pueda seguir colaborando a la Fundación Arco Iris, con la finalidad de continuar sus servicios a la población en situación de vulnerabilidad, y posibilitar también que los sueños de los niños, niñas y adolescentes, que se encuentran en situaciones de desventaja, puedan tener un futuro mejor.

Por ello, jóvenes voluntarios saldrán a las calles con latitas a solicitar aportes hasta el día de la Solidatón. La población también puede hacer su aporte en dos cuentas: 4010846161 (en Bs) y 4010897088 (en $us) del Banco Mercantil Santa Cruz.

FUNDACIÓN ARCO IRIS

El padre José Neuenhofer creó la Fundación Arco Iris en 1994, como un proyecto solidario, inicialmente compuesto por dos hogares para infantes y adolescentes, desprotegidos. Hoy, después de 23 años, esta labor ha crecido y se ha ido estructurando de forma preventiva, conforme avanza la problemática de las personas vulnerables, con el propósito de brindar una mejor vida y futuro a los beneficiarios.

En el transcurso del trabajo que realiza la Fundación y con el afán permanente de ayudar a los niños y jóvenes, la institución fue testigo de múltiples historias gratificantes, entre ellas la de una pequeña huérfana, que hace 12 años fue acogida por uno de los hogares de la entidad, donde permaneció hasta salir bachiller, y hoy es una empresaria próspera y dueña de una red de ferreterías en La Paz.

Asímismo, una adolescente cobijada por Arco Iris, a la ayudaron a salir de la prostitución, el consumo de inhalantes y la delincuencia, actualmente es una persona que reencaminó su vida, conformó su familia y es una madre dedicada de cuatro hijos, que genera sus propios recursosm mediante el comercio.

De la misma manera, un varón acogido en uno de los hogares de la Fundación Arco Iris, logró reinsertarse en una empresa de telefonía celular. Otro se convirtió en educador del Hogar “Casa de Paso”, como estas se han producido innumerables historias motivadoras, referentes y ejemplo de superación.