ESPECIAL
* Cantante, compositora y radialista, Teresa Suárez es una mujer multifacética, de emociones intensas que logró convertir el sentimiento en movimiento.
Acaba de cumplir 57 años de vida artística, entre buenos y malos momentos que acompañan esta historia que, sin duda, marcaron el corazón de la voz consagrada como “La revelación melódica”.
Son muchos los reconocimientos y discos grabados en estos años de trabajo, por lo que la cantautora boliviana, más conocida como Techy Suárez, se siente agradecida con la vida por los frutos obtenidos. “Doy gracias a Dios por todo lo que me ha permitido disfrutar y sigo disfrutando y al público, que siempre me acompañó, estoy muy satisfecha por lo conseguido”, mencionó la también actriz en la entrevista que le hizo La Guía.
LG: ¿CÓMO NACE LA INQUIETUD POR LA MÚSICA?
T: Desde pequeña estuve rodeada de arte. Todas las generaciones antes de mi mami eran amantes de la música. Mi abuelo era cochabambino, tocaba la mandolina y la guitarra, mis tíos eran músicos también, así que siempre estuve vinculada a la música, por lo que estoy convencida que la pasión se hereda. Mi mami fue artista de los años 30/40. Ella cantaba y me llevaba desde muy pequeñita a sus presentaciones, la acompañaba en sus viajes, entonces yo disfrutaba de los escenarios desde los cuatro años más o menos. Cuando decidí ser cantante, mi padre no quería saber. Mi madre me decía que termine de estudiar, yo ya tenía 15 años y en la radio El Cóndor, donde comencé, había un concurso buscando estrellas y ahí me presenté con el seudónimo de Odila para que mi papá, que trabajaba en esa emisora, no me reconociera (sonríe) (…). Dos años después, cuando ya estaba viajando al exterior, mi papá se enojó mucho conmigo porque él ya sabía que yo estaba en presentaciones.
LG: ¿CUÁNDO Y DÓNDE INICIA SU CARRERA ARTÍSTICA?
T: El primer contrato que hice fue el 2 de junio de 1960 para la presentación del argentino Ledesma que llegaba a Bolivia. Canté en el Teatro Municipal, me presenté con zapatitos planos, mediecitas cortas (sonríe), antes no había maquillaje así que debuté al natural.
LG: ¿CUÁNTOS DISCOS GRABÓ?
T: Muchos, un tanto afuera y otro tanto acá, pero el 2003 grabé un disco muy emotivo que lo presenté en un concierto, es muy querido porque participa mi madre y una de mis hijas. El disco se llama “Tres generaciones” y en ese año me doy como compositora. Canto un tema (de mi creación) y un vals peruano del famoso compositor Felipe Pinglo Alva con mi mami, es por eso que quiero mucho a ese disco.
LG: ¿HAY ALGUNA CANCIÓN QUE LE MARCÓ?
T: ¿La verdad?, hay muchas, pero creo que la más significativa es la que compuse con el título de “Ya soy abuela” porque es mi vida resumida a la que le puse música. Las canciones de los discos que una graba son los que se canta con expresión y marcan una etapa en la vida. Me gustan los valses de Chabuca Granda, como “El puente de los suspiros”.
LG: ¿QUÉ GÉNEROS MUSICALES INTERPRETÓ?
T: De todo (sonríe). El año 63 me sacaron como revelación melódica porque cantaba valses, boleros, tangos, música mexicana, baladas y música nacional, como los taquiraris más dulces…“Olvídate de mí, como yo te olvide…”, “Palmeras” de Gilberto Rojas y mi admiración nacional fue a Gladys Moreno. Canté de todo, pero lo que más quería era hacer conocer el canto boliviano. No fui cantante folclorista de Bolivia, no canté sólo música boliviana, yo me acomodaba al lugar que llegaba, Argentina, Chile, Brasil, Perú, Ecuador, Paraguay, Venezuela, etc.
LG: ¿CON QUÉ ARTISTAS PARTICIPÓ?
T: Huyy… con muchos, antes llegaban artistas de talla con todo su equipo. Tuve la suerte de trabajar con muchos de ellos. Por ejemplo, llegó Rosita Quintana, Rosa del Castillo, Pedro Infante, Javier Solís, Enrique Guzmán. He tenido la suerte de conocer a mucha gente dentro y fuera del país.
Por el 64 creamos el trío Los Genios con Víctor Córdova y Samuel Guachalla para la llegada del mexicano Miguel Aceves Mejía.
TECHY SUÁREZ “Voz y emoción del…”
El 65 me invitan al Cuarteto Souvenir, ahí conocí a Rudy Galindo, Mario Riveros y con la fugaz intervención de Pepe Murillo fuimos a Perú, alternamos con Los 5 Latinos. En 1966 me casé con Rudy Galindo y seguíamos cantando.
El 65 y 66 fueron años de éxitos en Perú y de elogios para los bolivianos. “Los bolivianos están sacando ronchas”, decían grandes comentaristas de ese tiempo (…).
LG: ¿QUÉ SATISFACCIONES LE DIO LA MÚSICA EN ESTOS AÑOS?
T: Demasiadas, he cantado tanto, he viajado, he disfrutado del calor de los aplausos. En estos años, pues me dio conocimiento, algo que ahora puedo transmitir a las nuevas generaciones. No es sólo agarrar el micrófono y cantar, es sentir, es amar, las canciones hay que estudiarlas para cantar y estoy convencida de que el talento no se compra, con el talento se nace y se lo alimenta (…). Otro orgullo es sentir que me aceptaron en Perú como boliviana cantando música peruana y yo iba cantando con músicos peruanos y decían: “El encanto boliviano Techy Suárez”, “la revelación melódica” y eso de Techy me lo pusieron allá (sonríe) (…). También me decían “La roperito Suárez”, pero no por el volumen (sonríe) sino porque llevaba distintos trajes a cada actuación y todos muy elegantes, se tenía que estar a la talla de los otros artistas.
LG: ¿CUÁL ES EL ESTILO DE TECHY?
T: Yo escojo los temas bolivianos y las cuecas bien expresivas para cantar porque ese es mi estilo, es la forma que tengo de cantar con sentimiento, ya me habían puesto el nombre en todos los lugares donde yo estaba… voz y emoción del canto.
“NO PUEDO DEJAR DE HACER RADIO”
Otra de las pasiones de Techy Suárez es, sin duda, la radio. La artista cuenta que siempre estuvo vinculada al micrófono. Comenzó el año 1968 en Radio Nueva América bajo la dirección de Raúl Salmón de la Barra junto a su esposa Elvira Llosa y su hijo.
Luego vinieron otras experiencias, hasta la consolidación del programa radial de ARTEPORBOL (Artistas Unidos Época de Oro de Bolivia) “Música, canto y talento boliviano de ayer, hoy y siempre”.
“El 2013 nace el amor por ARTEPORBOL con el objetivo de mantener viva la música de ese tiempo junto a colegas, amigos con los que compartimos el amor por la música. No tengo estudios en radio, pero la escuela de la vida enseña de todo. Ha pasado tanto tiempo y no puedo dejar de hacer radio, gracias a Dios seguimos manteniendo la voz, así que será hasta que él lo permita. El 2010 hice el himno a la Universidad Católica Boliviana para los de la tercera edad, canciones al mar, del 2011 hasta ahora más me dediqué a ARTEPORBOL y ahí hice muchas composiciones”, menciona.