Pandillas todavía delinquen pese a patrullajes policiales

Vecinos de Ciudad Satélite, Villa Dolores y 12 de Octubre, dan cuenta que las pandillas juveniles dedicadas a hechos delictivos continúan generando inseguridad ciudadana, pese a anuncios de patrullajes policiales.

Cracy, que significa locas o locos y los (as) Lurias, término que se utiliza en México y Argentina como locos sentimentales, son los nombres de algunas pandillas que ocupan las zonas urbanas del D-1 y generan temor entre los vecinos.

“BAUTIZO”

De acuerdo con Jimmy, la pandilla a la que pertenece pudo llegar al grupo luego de un acto de bautizo, el cual consiste en aguantar cerca de 10 minutos una jornada de paliza de todos los componentes de dicha agrupación como ceremonia de aceptación.

“A mi zona han llegado ellos, un día, y como mi amigo de calle había estado al interior del grupo, él ha sido quien me los ha presentado, para que pueda ser parte, cuando dije que sí, que aceptaba, ese mismo rato es que me han llegado a bautizar y de pronto he recibido golpes, fue rápido y ahora estoy con ellos. Nos reunimos sólo en las noches, porque estoy estudiando en la tarde, los fines de semana es cuando estoy más con ellos, nos encontramos.´El grupo estuvo a punto de dividirse porque unos quieren ir a beber y luego voltear algunos mareados, otros prefieren estar en los juegos del internet, para pasar la noche o asistir a alguna fiesta de la Ballivián, siempre hay fiestas”, explicó.

MALTRATO EN FAMILIA

En tanto Loreta, recuerda que ella ingresó a la pandilla por razones sentimentales, porque cuando ella era víctima de los golpes de su padre, recuerda que quien más le tranquilizaba para que no tome una decisión fatal, fue su enamorado, quien es parte de la pandilla que ahora es mixta, porque se unieron las denominadas Cracy con algunos Batos locos.

“Ahora mi padre ya no me golpea mucho, porque una vez cuando me pegó con un cable, mis amigos le dieron una paliza, para que no me vuelva a tocar y cuando él llegó a mi casa yo me oculté en la cocina, desde ese día es que no hablo con mi padre”, recuerda Loreta.

TEMOR VECINAL

Los vecinos observan con preocupación la proliferación de grupos de jóvenes y gente mayor o grupos mixtos, quienes los fines de semana suelen arrinconar algunos transeúntes, con la finalidad de reducirlos y lograr sustraer todos sus objetos de valor. Pese a los anuncios de patrullajes, operativos y tareas anunciadas por la policía, en las noches, la única presencia activa son la de las pandillas, indicó German Cruz vecino de Villa Dolores.

“La policía parece solo un rato o en el día, cuando no hay pandillas y en las noches, somos nosotros los vecinos quienes debemos buscar nuestra propia protección, tenemos que salir a esperar a nuestros hijos que llegan de la universidad, estamos siempre al pendiente porque policía, no encuentra uno a la hora de pedir auxilio”, reclamó.

DIPROVE

En la ciudad de El Alto, efectivos policiales lograron recuperar un minibús robado, luego de una persecución que realizaron a bordo de un taxi de servicio público.

El coronel Rubén Cerrudo, director de la Diprove de El Alto, informó que este caso se registró el viernes por la noche.

Según el reporte policial, el minibús de color rojo correspondiente al Sindicato Norte fue robado en la zona Río Seco, cuando su conductor se bajó del mismo por unos minutos para comprar un refresco.

El chofer buscó ayuda de policías que estaban cumpliendo labores preventivas en el marco del plan Tukuy Rikuy.

Entonces, dos policías y el denunciante se subieron a un taxi para seguir al minibús. Hicieron la persecución y lograron interceptar al mismo en proximidades de la Ceja, en inmediaciones de la avenida Franco Valle.

Los uniformados capturaron a dos jóvenes, de 19 y 22 años, quienes eran los responsables del robo.

Los aprehendidos fueron sometidos a audiencia de medidas cautelares, donde un juez los envió a la cárcel de San Pedro, según el coronel Cerrudo.