Donald Trump agranda su cadena de errores

El señor Donald Trump, desde que inició su campaña para conseguir la Presidencia de los Estados Unidos, ha cometido serios errores que le han valido inclusive el desacuerdo de muchos de sus partidarios republicanos; su conducta, contraria a todo lo que había sustentado siempre su país, fue adquiriendo tintes de gravedad. Son tantos los yerros cometidos que la misma opinión pública solo se refiere a los últimos que resultan muy graves: el primero, sus concomitancias con Rusia al extremo de haber proporcionado información privilegiada; el último está referido al hecho de haber retirado a Estados Unidos del Acuerdo de París contra el cambio climático.

La decisión de Trump ha causado reacciones en contra en la mayoría de las instituciones y población estadounidense y, además, la condena de los países del mundo -con excepción de Nicaragua y Siria que, en su momento, no aprobaron el Acuerdo-; una decisión que es atentatoria contra el futuro del planeta tierra porque se trata de ignorar una decisión por la que todos los países, desarrollados o no, deben establecer metas para reducir las emanaciones de dióxido de carbono (CO2) con el fin de cuidar el medioambiente.

Retirar a EEUU del Acuerdo implicaría que no tendría la responsabilidad para coadyuvar al cuidado del medioambiente, no obstante ser el segundo país del planeta que emite más gas carbónico. El diario New York Times, prácticamente haciendo suyas las preocupaciones de todo el mundo, explicó: “En diciembre de 2015 todos los países del mundo -195 en total- se sumaron al primer pacto global para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que contribuyen a aumentar la temperatura global. Fue un logro diplomático histórico. Los estudios científicos indican que si las emanaciones de los gases de efecto invernadero continúan al paso actual, las temperaturas atmosféricas seguirán aumentando y podrían pasar el umbral de dos grados Celsius más respecto a la temperatura preindustrial. Eso significa que el mundo será más caliente, que los niveles del mar se incrementarán, las tormentas e inundaciones serán más fuertes al igual que las sequías y que habrá escasez alimentaria y más condiciones extremas”. Añade el diario neoyorkino: “No hay que olvidar que las temperaturas globales ya rompieron récord en 2016, el año más caluroso desde que hay registro”.

El caso es grave y si Estados Unidos no retrocede en su posición, el mundo tendrá que adoptar medidas muy severas para reducir efectivamente los atentados contra el medioambiente. El Sr. Trump, si se aleja mínimamente de su posición de soberbia y petulancia, podría reconsiderar lo que para los Estados Unidos significa: un gravísimo atentado contra la vida de la humanidad. Estados Unidos, por las mayores emisiones de gas que despide está obligado a cuidar el medioambiente; es una responsabilidad que no puede rehuir.