Misión científica expuso hallazgos prehispánicos

Objetos prehispánicos como fragmentos cerámicos, líticos y de oro, además del diente de un felino conocido como “titi” extraídos del fondo del islote Khanaskiya del lago Titicaca fueron expuestos en una asamblea de la comunidad de la isla Tirasca con información sobre las investigaciones subacuáticas que realizó una misión científica conformada por arqueólogos bolivianos y belgas del Proyecto del Lago.

El director de la investigación, Christophe Delaere, que obtuvo sus estudios de doctorado con la Universidad Libre de Bruselas con las investigaciones en las profundidades del lago sagrado, asume que mostrar el material arqueológico a los pobladores, “se constituye en un intercambio, principalmente de agradecimiento a las autoridades originarias y al propio pueblo, ya que la única forma que el proyecto avance es trabajar mano a mano por la  comunidad”.

Los datos obtenidos del barrido de un sonar –radar de sonido bajo el agua– en el Wiñaymarka revelaron varias irregularidades identificadas por los investigadores como anomalías culturales en las que se buscan los rastros culturales entre estructuras que están sumergidas de períodos como pre Tiwanaku, Tiwanaku e Inca.

“Los hallazgos nos permiten conocer más del pasado de los pueblos, ya que el lago Titicaca es uno de lugares más antiguos de los Andes”, dijo Delaere, mientras mostraba cada uno de los objetos a los comunarios en la asamblea de Tirasca del municipio de Puerto Pérez que se convirtió en una celebración con música y danzas nativas por el patrimonio cultural que fue descubierto.

Los asistentes a la asamblea sorprendidos pudieron observar los objetos arqueológicos, mientras que los ancianos coincidían en afirmar que la pequeña isla Khanaskiya distante a unos 500 metros en medio del lago menor o Wiñaymarka, donde se sumergieron los buzos para excavar por el lapso de tres semanas, “fue hace muchos años un lugar de cultivos y de cosecha con un sendero que conectaba con otros lugares”.

OBJETOS HALLADOS

Más que los artefactos extraídos debajo del limo –afirmó el Director del Proyecto del Lago– es la información que podemos obtener a través de ellos, ya que se trabaja sobre la historia del pasado de la cuenca del Titicaca. El científico de Bélgica que conoce la región lacustre desde hace 10 años y que investiga durante cinco, afirmó que su trabajo incluye necesariamente el socializar con las comunidades los hallazgos arqueológicos que se obtienen en las inmersiones subacuáticas por que se realizan en sus jurisdicciones.

Uno a uno son mostrados a los comunarios los objetos prehispánicos que durante miles de años estuvieron ocultos en las profundidades del lago sagrado, quienes sorprendidos se alegran y se sienten herederos de la riqueza arqueológica del fondo del espejo lacustre.

Los investigadores todavía tienen que realizar otros estudios del material descubierto como los trozos de cerámica –las indagaciones determinarán si fueron parte de objetos ceremoniales o utilitarios– y de los dos pequeños fragmentos de oro que pudieron ser parte de otros objetos metálicos más grandes. También sobresale y no deja de sorprender el diente de un felino, conocido tradicionalmente como “titi”, que puede tener una antigüedad de más de 1.500 años, según los arqueólogos subacuáticos. El mamífero fue considerado un animal sagrado y vinculado a la ritualidad para las culturas prehispánicas.

DESARROLLO DEL TURISMO

El secretario general de la isla Tirasca, Carmelo Quispe, anunció que el material antiguo extraído del fondo del Titicaca se quedará en la comunidad para enriquecer los dos repositorios que también exponen otros objetos arqueológicos, entre ellos “chullpas” o entierros prehispánicos. “Los hallazgos que nos mostraron alegran al pueblo, ya que con esto podremos impulsar el turismo comunitario de nuestra región”, aseveró Quispe.

La autoridad explicó que es posible que la región haya tenido un carácter ceremonial para los pueblos del pasado, ya que se descubrieron entierros en diferentes lugares como la isla Quehuaya cercana a Tirasca, además de otros vestigios en la isla Pata Patani, también del lago menor o Wiñaymarka.

El Proyecto del Lago es financiado por el Reino de Bélgica y Bolivia, se inició el 2016 y pretende contribuir a mejorar hasta el 2018 la gestión del patrimonio cultural de la cuenca del Titicaca y promover el desarrollo del turismo comunitario en beneficio de las comunidades de 13 municipios.

Es ejecutado con un financiamiento de más de 1,5 millones de euros y se originó por las investigaciones de la tesis doctoral de Cristophe Delaere, quien junto al arqueólogo boliviano Marcial Medina –codirector del proyecto– entre el 2012 al 2015, sacaron más de dos mil objetos provenientes de la cultura Tiwanaku e Inca del fondo del limo.

Los investigadores del Proyecto del Lago que ahora realizan inmersiones en el arrecife de Ojjelaya en San Pedro de Tiquina, donde también identificaron un yacimiento subacuático, pueden excavar aproximadamente una extensión de 80 metros cuadrados; sin embargo, el Titicaca tiene una superficie de más de ocho mil kilómetros cuadrados, por lo que las investigaciones pueden prolongarse para las siguientes décadas con la participación de arqueólogos bolivianos que son capacitados en la investigación.

(CienciaBolivia)