Política centralista causa desgobierno

Han pasado más de 10 años desde que se hizo cargo de la economía del país el anterior Ministro y su criterio fue siempre centralista, lo que ha provocado desgobierno. Esa impresión se tiene en la sede del gobierno porque diariamente hay manifestaciones de protesta en las calles de la urbe paceña, con pedidos diversos que en el fondo son económicos. La situación llega al extremo porque en regiones del interior existe el convencimiento de que para que sean escuchadas sus demandas tienen que llegar a la ciudad de La Paz, porque es la sede del gobierno, donde están los diferentes ministerios. Por eso las calles de la urbe paceña son casi a diario alborotadas por grupos de ciudadanos de diversas entidades sociales pidiendo reivindicaciones de tipo económico, político y social.

La ciudadanía paceña al parecer se acostumbró a este trajín diario, al extremo de soportar el ruido de cartuchos de dinamita. Ante todo este panorama, existe la esperanza de que podría haber cambio en la política económica del país con el nuevo Ministro y así avance la descentralización en las regiones del país, lo que significaría un gran paso para la política económica de Bolivia. El país necesita salir de su atraso, las regiones están pidiendo descentralización y aplicación plena de las autonomías, mediante gobernaciones y alcaldías.

Esto significa la aplicación del pacto fiscal y así las regiones podrán sostenerse económicamente con lo que producen, porque en el nuevo presupuesto nacional estarán las partidas para sostenimiento de gobernaciones y alcaldías y tendrán con el Gobierno central solo en algunos capítulos. En esta forma cada región tendrá autonomía, cesando las manifestaciones callejeras en la sede de gobierno. Así la opinión pública podrá sentir que no hay desgobierno, porque las regiones aplicarán las autonomías.

Por estos aspectos la ciudadanía pide la aplicación del pacto fiscal dando fin a la centralización del gobierno. Que el nuevo Ministro maneje la economía del país con criterio popular y democrático y se dé los primeros pasos para alcanzar la descentralización del Estado boliviano, lo que significaría mayor progreso en las regiones y así podamos avanzar como país. Es el momento de dar un cambio de timón en el manejo económico, con descentralización a fin de fortificar al Estado boliviano. Hay esperanza en las regiones para la aplicación de las autonomías, lo que fortalecerá al país, reduciendo con éxito la pobreza y la miseria de los sectores populares. Solamente se necesita buena voluntad para sacar adelante a los sectores y en ese aspecto la descentralización es la solución para disminuir el hambre y la pobreza de grandes grupos sociales.

El autor es Profesor Emérito y ex-autoridad universitaria de la UMSA.