“Primeras Luces” fue experimentado con alumnos y por eso está vigente hasta ahora

Santa Cruz.- El diario local El Día publicó en el año 2014, una entrevista con la maestra Gladys Rivero de Jiménez, que a continuación reproducimos:

P. Profesora, ¿cómo era antes la formación de los maestros en las normales?

G.R.J: Tuve la suerte de contar con excelentes maestros en Sucre, donde estaba la única normal del país. Para estudiar en allí los futuros profesores eran seleccionados por carrera y preparación. Teníamos una excelente formación porque la enseñanza era práctica, pero ahora es muy libresca.

P. ¿Qué lectura tiene de la actual enseñanza de los estudiantes en las escuelas del país?

G.R.J: La educación en nuestro país está de muy bajo nivel y no es porque yo lo diga. Eso se nota en los exámenes de ingreso a la universidad, donde de cada 1.000 alumnos sólo logran ingresar 400 y con una nota mínima.

P. En su criterio, ¿cuáles cree usted que son los factores para que se dé esta situación?

G.R.J: Considero que uno de los factores son los bajos sueldos que paga el Estado a los maestros porque no les alcanza para vivir. Por eso el profesor debe trabajar en dos y hasta en tres colegios y eso le impide tener tiempo para prepararse.

Esto hace que los mejores alumnos ya no quieran estudiar para ser maestros.

P. ¿Qué opinión tiene de la nueva Ley Educativa Avelino Siñani - Elizardo Pérez?

G.R.J: La respuesta a esa pregunta es algo que no me gustaría comentar ni hacer juicios de valor.

P. Si usted fuese Ministra de Educación, ¿cuáles cree que deberían ser las soluciones estructurales para mejorar la educación de nuestro país?

G.R.J: Primero desdoblaría los turnos de mañana y tarde (yo estudié y trabajé todo el día) porque el medio tiempo no alcanza para formar a los alumnos. Otra medida debería ser mejorar el sueldo de los profesores. En las normales se trabajaría más para preparar mejor a los maestros.

P. ¿Qué opina usted sobre las nuevas herramientas tecnológicas para la enseñanza?

G.R.J: Yo no aprendí a usar la computadora. Todos mis libros los escribo a mano, los hago pasar en máquina, los corrijo y después van a la computadora con las ilustraciones, que me las hace un dibujante; sin embargo, considero que la nueva generación de maestros debe formarse en las nuevas tecnologías.

P. ¿Cuáles cree usted que son los nuevos retos de los maestros?

G.R.J: Los maestros tienen ganas de estudiar, antes no habían las licenciaturas. Ahora, por un lado, los obligan y por otro el maestro tiene ganas de prepararse. Lamentablemente no hay incentivo económico para aquellos que se preparan porque siguen ganando el mismo sueldo todos.

P. Háblenos un poco de su vida, ¿cuál ha sido su secreto para ser una maestra exitosa y qué la hace feliz?

G.R.J: Lo primero es la dedicación, lo segundo la experiencia de trabajar con los niños. Escribir libros y ser formadora de maestros me hace muy feliz. Es una experiencia muy agradable volcar el conocimiento a los demás.

P. ¿Cuánto años enseñó en las escuelas?

G.R.J: No fueron muchos años los que pasé clases, han sido ocho, porque me gradué en 1943 y en 1952 fui seleccionada para formar parte de la Escuela Piloto de Miraflores con los expertos de la Unesco, una experiencia maravillosa que me permitió, además de aportar a la educación de mi país, seguir formándome y actualizando mis conocimientos en el exterior.

P. ¿Qué la motivó a escribir libros?

G.R.J: Mi vocación por la educación. Poder formar las mentes de los niños desde tan pequeñitos y con un método que les permita disfrutar el aprendizaje.

P. ¿Qué recuerda hoy del libro Primeras Luces?

G.R.J: El libro no fue hecho en un escritorio, fue experimentado con alumnos y por eso está vigente hasta ahora. Cada año voy mejorando y aumentando cosas nuevas de hoy.

P. ¿Cuántos libros ha escrito hasta ahora?

G.R.J: He escrito 60 libros, entre los textos de lectura y escritura, además de los textos regionalizados de acuerdo con la Reforma Educativa. Ahora sigo escribiendo y pronto saldrán mis nuevas publicaciones.