“Utilidad está en orientación que se dé a la nueva carrera”

En criterio del cineasta Roberto Calasich, hacer cine es muy difícil, siendo que así como en los años 30, hoy no existen los recursos suficientes para hacer arte en el país, pese a tener una cultura amplia. "Tenemos una rica cultura, pero crear un industria de la cultura siempre tiene sus problemas", afirmó.

Respecto a la pugna por la apertura de la carrera de cine en las facultades de Humanidades y Sociales de la UMSA, indicó que el problema se basa en la orientación que se le dé.

"En este momento se puede hacer cine de una manera muy ágil, muy barata y se puede llegar a través del YouTube y del internet a diferentes personas a muy bajo costo. Si estamos hablando del celuloide, eso no es viable, pero el cine hecho con 1k o 2k o con un teléfono Iphone, con las nuevas tecnologías es viable, lo importante es el alma con el que van a hacer la carrera, la perspectiva, si vamos a apoyarnos en nuestra cultura para ingresar a una globalización y a partir de ello mostrar propuestas diferentes y novedosas esa carrera del cine va a llegar muy lejos", aseveró.

DIFÍCIL TAREA

Aseguró que de estar en la posición del rector de la UMSA, Waldo Albarracín, daba la tuición de la carrera de cine a Humanidades porque ellos fueron los que iniciaron el tema. "Muchas veces no se gana por el raciocinio sino por el ritmo, es decir aquellas personas que vieron la iniciativa le van a poner más ganas, los otros solo están actuando como los perros de hortelano, una vez que la carrera estaba por ser aperturada recién reaccionaron y dijeron que la carrera les corresponde", indicó.

Consultado sobre el apoyo que reciben los cineastas para rodar un film y si fue fácil llevar a la pantalla grande, por ejemplo, la película "La bicicleta de los Huanca", afirmó que no fue fácil pese a que no ha sido cara ya que utilizó tecnología diferente que en ese momento era el video umatic, aplicado a hacer cine a partir de televisión.

"El apoyo es endeble, pequeño, unos te dan su bicicleta, otros te dicen ven a mi casa a filmar o como esa vez el padre de Pucarani nos dio el ambiente de la iglesia para filmar y nos alojó ahí para que estemos tres días, ese es el apoyo real que uno consigue en el cine boliviano. Cuando uno tiene éxito tampoco llegan los recursos porque viene la piratería y se lleva todos tus dólares que deberías tener en el bolsillo para seguir invirtiendo. Cuando tienes éxitos no tienes dólares, cuando no lo tienes tampoco", relató.