Piezas y sitios patrimoniales tendrán respaldo científico

La conservación del patrimonio cultural boliviano tendrá el respaldo científico de profesionales y laboratorios especializados de Brasil y México para el análisis de materiales arqueológicos con la interacción de una masa crítica interdisciplinaria y el empleo de métodos y técnicas físico-químicas nucleares con el objetivo de promover la disciplina en Latinoamérica.

La propuesta surgió del “Simposio Latinoamericano de Física y Química en Arqueología, Arte y Conservación del Patrimonio Cultural” –en su sexta versión– denominado Lasmac (por sus siglas en inglés) que reunió durante cuatro jornadas a expositores de Argentina, Bélgica, Brasil, Chile, EEUU, Francia, México, Perú, Panamá y Colombia, además de Bolivia, que presentaron una treintena de ponencias en el Museo Nacional de Etnografía y Folklore (Musef) en La Paz.

“Damos el primer paso ya que las instituciones relacionadas a la conservación y el estudio del patrimonio –de Brasil y México– están dispuestas a respaldar los proyectos bolivianos que presentemos”, dijo el organizador del Lasmac en Bolivia, Jorge Lisme, quien anunció que el siguiente evento de 2019 se realizará en la Ciudad de México. El encuentro científico que se desarrolló del 10 al 14 julio permitió conocer más de las metodologías que pueden ser aplicadas en el estudio del material patrimonial.

Según Lisme que tiene estudios de doctorado en Física Nuclear Aplicada, se ha cumplido con el objetivo principal que fue el recibir a los investigadores de Latinoamérica, EEUU y Europa, que mostraron sus trabajos en arqueometría –disciplina científica que usa métodos físicos o químicos para los estudios arqueológicos– provenientes de laboratorios del exterior.

PROYECTOS DE VINCULACIÓN

El científico mexicano Ángel Ramírez, miembro de la Comisión Científica Internacional del Lasmac, dijo que el foro que se cumplió en La Paz tuvo como uno de sus objetivos coordinar los proyectos de vinculación y colaboración entre los participantes. “En México estamos dispuestos a colaborar a los arqueólogos y restauradores bolivianos”, adelantó Ramírez.

Detalló que se podrán establecer las bases de colaboración con los proyectos y las iniciativas del país que se presenten en México. “La última década se ha avanzado en los métodos analíticos de laboratorio para resolver los cuestionamientos sobre material patrimonial que se estudia”, aseveró.

Explicó que la arqueometría en su aplicación emplea métodos físicos químicos de las ciencias duras y se consolida como una herramienta para la arqueología y que actualmente es difícil considerar a la arqueología sin este componente, que a la vez es interdisciplinario.

Ramírez, quien trabaja en el Laboratorio de Termoluminiscencia del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y con más de 20 años de experiencia, considera que el arqueómetra “no es el físico en el laboratorio ni el arqueólogo en el campo, es un híbrido al que se suma la interdisciplinariedad, por lo que en la medida que haya más personas involucradas en este tema, entonces la arqueología como tal va ir subiendo su nivel”.

INTEGRACIÓN PATRIMONIAL

Para la científica argentina Cristina Vásquez, quien participó del Lasmac en representación de la Comisión Nacional de Energía Atómica y de la Universidad de Buenos Aires, la organización del encuentro en la Ciudad de México en 2019 “es una idea excelente ya que el evento debe integrar a Latinoamérica por el cuidado del patrimonio cultural”.

“Es una disciplina –la arqueometría– que apareció en los últimos años como una necesidad natural de recurrir a técnicas que se empleaban para otro tipo de cosas y que han demostrado ser útiles para el patrimonio”, reiteró Vásquez.

Remarcó que la tecnología existente en Latinoamérica –Argentina, Brasil y México– es igual a la europea, por ejemplo, “nuestros amigos brasileños cuentan con un ciclotrón –acelerador de partículas de trayectoria circular usado para el bombardeo del núcleo de los átomos para producir transmutaciones y radiactividad artificial– que es el mismo que tienen en Europa”.

En relación a los profesionales que pretenden formarse como arqueómetras, Vásquez aseveró que lo importante es instruirse, ya que si el individuo se instruye es menos influenciado por ideas ajenas o para otros fines. “Lo importante es instruirse y tener un propio modelo de vida para poder elegir lo que queremos hacer”, añadió.

El físico brasileño de la Universidad de San Pablo de Brasil, Oswaldo Baffa, calificó de “muy bueno” el evento del Lasmac 2017, ya que las ponencias tuvieron un nivel muy profesional. “Creo que el campo –de la arqueometría– camina bien y en Latinoamérica se avanzó y que las nuevas generaciones deben interesarse por la disciplina que es un campo fascinante”, acotó.

Detalló en su ponencia sobre el uso de la metodología de la espectroscopia de resonancia que mide la cantidad de electrones libres que son creados por la radiación ambiental, ejemplificó que cuando se tiene una muestra de un fósil por miles de años también se tiene depositado una dosis de radiación que permite conocer el tiempo de antigüedad que posee la respectiva muestra.

PONENCIAS

Fue notoria la diversidad de exposiciones de los especialistas de los nueve países participantes que detallaron más de una treintena de ponencias sobre la implementación de técnicas físico-químicas nucleares no destructivas que se utilizan para el análisis del patrimonio arqueológico.

Se conocieron por ejemplo las técnicas de fluorescencia de rayos X aplicada en cerámica, análisis químicos de ocupaciones arqueológicas, datación con carbono 14 y espectrometría de masas, protocolos de selección y manipulación de muestras para datación y análisis con carbono 14, además de otras tecnologías en las conferencias magistrales.

El primer simposio Lasmac se realizó en San Pablo en 2007, posteriormente y cada dos años se cumplieron en 2009 en Cancún, en 2011 en Lima, el 2013 en Bogotá y el 2015 en Quito, oportunidad en la que se solicitó a la Comisión Científica Internacional que Bolivia sea la sede del sexto simposio Latinoamericano.

El encuentro científico en su sexto año contó con la organización institucional del Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas y Administración de Tiwanaku (Ciaaat) que está dirigido por el arqueólogo boliviano Julio Condori. (CienciaBolivia)