Vaca Muerta y la nueva Argentina

La producción no convencional de gas y petróleo va a reconfigurar, en un quinquenio, el escenario de los negocios energéticos de Mercosur y del cono sur latinoamericano.

La noticia de inversiones en Neuquén, la provincia (estado) de Argentina de mayor importancia desde la perspectiva de la producción de gas no-convencional es impactante para toda América Latina: cuatro compañías petroleras suman USD 1150 millones de inversión en Vaca Muerta.

Vaca Muerta es una formación de reservas de gas/petróleo tipo shale, situado en su porción principal en Neuquén. Las multinacionales YPF, Total, Pan American Energy y Wintershall suscribieron un acuerdo de inversión por USD 1.150 millones para producir hasta diciembre de 2021 gas no convencional, inversión únicamente en esa área.

Según estimaciones de expertos y amigos exSecretarios argentinos con los que estuve tertuliando, esas inversiones -junto a otras- y la explotación y producción de gas en ese reservorio podría ser el estímulo para que Argentina recupere su autoabastecimiento, no necesite mucho gas externo e inclusive -en algunos años- pueda pensar en exportar gas natural.

Las inversiones en el área son producto de una nueva política de estímulos que aplica el liderazgo del presidente Mauricio Macri, luego de casi una década de inacción en el sector, y tiene que ver -en líneas generales- con la supresión de barreras a los tipos de cambio, flexibilidad en la concesión de licencias a la importación, reformas para eliminar las trabas y proteccionismo y principalmente un marco legal y político de estabilidad. Era importante el levantamiento de los controles de cambio para fomentar la transferencia de divisas y beneficiar la entrada de moneda extranjera en el país y la modernización de su esquema energético; creó el Ministerio de Energía con tuición sobre hidrocarburos y energía.

El estar, nuevamente, en el centro global de atención internacional hace que Argentina sea sede de la próxima conferencia de ministros de la Organización Mundial del Comercio 2018, evento de altísima importancia para el libre mercado.

Volviendo al tema específico del sector oíl & gas: las inversiones en Vaca muerta permitirán hasta 2021 perforación de más de 78 pozos horizontales, más la construcción de líneas de recolección para transportar la producción y plantas de tratamiento. Neuquén otorgó concesiones de Explotación No Convencional de Hidrocarburos por 35 años, en el marco de la legislación nacional de hidrocarburos (Ley 27.007, aprobada en octubre de 2014). Han sido muy creativos en estimular que inversiones privadas pongan dinero en el área oíl & gas en tiempos en que el precio el barril de petróleo no está en su mejor momento. Eso dice bien de Macri y su equipo: pueden lograr captar la atención y la inversión externa en épocas de crisis.

En este nuevo éxito que se vislumbra en negocios de exploración/explotación de gas no-convencional, la provincia Neuquén es la que mayor inversión atrae en Argentina, sólo superada por Buenos Aires; por ejemplo, de los USD 63.887,5 millones de inversión comprometidos desde el inicio de la gestión de Macri hasta el final del primer semestre de 2017, USD 16.450,3 millones (25,7%) son para sector petróleo y gas y Neuquén concentra USD 11.002,5 millones (el 66,9% del sector). Cifras importantes que reflejan el nuevo ciclo que está viviendo Argentina y esa provincia.

Datos de fuentes conocedoras del sector corroborados por anuncios oficiales indican que las inversiones señaladas darán sus frutos: en esta primera etapa duplicarían la producción de gas natural a 4,5 mmm3d (millones de metros cúbicos por día), en el año quinto: 16 mmm3/d y desde el año décimo: 32 mmm3/d. es un crecimiento exponencial de 60% de la producción de gas. Argentina importa aproximadamente 25 mmm3d.

Con ello se puede aseverar que Argentina es pionera en Mercosur en invertir y explotar shale oíl y shale gas (producción de petróleo y gas desde reservorios no-convencionales) que para 2021 podrían generarle un equilibrio entre consumo y oferta interna de gas natural, de manera que reduzcan importaciones.

Las inversiones en el sector oíl & gas traerán a la par inversiones en infraestructura: parque industrial, un tren de alta gama que unirá Vaca Muerta con el puerto denominado Ingeniero White.

Esas inversiones en hidrocarburos dejarán manos libres al estado federal (central) para invertir en nuevas energías; además de generar equilibrios entre oferta/demanda interna de gas (con el gas no-convencional como hemos ya comentado) tendrán oportunidad de agregar más inversión a renovables: para electricidad. De momento hay más de 50 proyectos (suman aproximadamente 2.500 MW) en generación eléctrica vía solar y eólica (la Patagonia tiene alto potencial en vientos).

Naturalmente la producción de más gas en Vaca Muerta dará un respiro a Argentina para estimular inversiones, construcción de infraestructura, y otros para lograr equilibrios en costes de generación vía renovables.

Así está la Argentina, logrando inversiones, generando propuestas y proyectos. En cambio, otros países, los populistas, están dilapidando gas y petróleo a mano llena.

Felicidades, Argentina, ¡van en buen camino!

Úzqueda @BorisSGomezU