TOCANDO FONDO
El bullado proceso instaurado por el Club Oriente Petrolero al director técnico de The Strongest, Cesar Farías, por agresión a su dirigente, ha destapado la olla sobre la injerencia de los dirigentes en los fallos de los Tribunales de Justicia Deportiva.
Empecemos con los Tribunales de los departamentos. Conocemos por denuncias de varios clubes de la Asociación de Fútbol de La Paz, que el Presidente actualmente recluido en la penitenciaria de San Pedro, designaba en una mesa extra domicilio legal de la Asociación a los cinco miembros de su “Tribunal” y que todos los fallos dictados por este cuerpo colegiado, pasaban confidencialmente primero por sus manos y los delegados de clubes que no comulgaban con las decisiones en el manejo totalitario de la entidad, por su persona, estaban desahuciados de alcanzar justicia, de donde se evidencia que los fallos ya se encontraban digitados y resueltos por el mandamás.
El Tribunal de la Liga es privado, contratado por el expresidente, un reo rematado que se acogió a un proceso abreviado ante la Justicia Ordinaria, aceptando haber incurrido en manejos dolosos de los dineros de la F.B.F. Un Tribunal administrado por un buffet familiar del que se desconoce el monto que percibe por sus servicios.
Este Tribunal al haber sido contratado por los clubes, dicta fallos parcializados a los mismos y como ejemplos cercanos tenemos, el criminal volapié que propinó un jugador de Oriente Petrolero a un adversario esperándolo en la boca del túnel, cuyas imágenes recorrieron el mundo y que fue sancionado con la pena de simplemente de seis meses. Las grescas en Sucre y Oruro entre jugadores y dirigentes identificados, castigados con dos y tres partidos. A los jugadores que empujan, escupen, cabecean y patean a los árbitros sancionan con tres partidos de suspensión siendo la pena mínima de dos años. Asimismo, admite todas las demandas de los clubes pese a que las mismas ya se encuentran radicadas en la Justicia Ordinaria, existiendo con exactitud de causas (dos tribunales administrando el mismo proceso), siempre con el ánimo de favorecer a los clubes que le cubren su contrato.
Por lo tanto, es un Tribunal cercado por los dirigentes y el fallo dictado contra Cesar Farías, es la factura que debe pagar por su contrato, porque de otra manera no se puede explicar una sanción tan deshonesta, absurda y desubicada, frente a los benignos castigos enumerados por hechos mucho más graves que un leve manotazo (que también es agresión), sin ulteriores consecuencias corporales.
El Tribunal Superior de Disciplina Deportiva de la F.B.F. está conformado por exdirigentes, asesores legales y socios de los clubes de la Liga, “colocados” para defender los intereses de sus clubes. Este Tribunal en su mayoría tiene representantes de los clubes del oriente del país, si recordamos que hace más o menos dos años, el asesor legal de Oriente Petrolero Víctor Hugo Pérez, recusó a todo el Tribunal en un proceso que tenía contra el Club Blooming, fundamentando la misma, en sentido de que los cinco miembros eran exdirigentes del citado club, dejando sin Tribunal a lo largo de un año, hasta que fueron nombrados nuevos miembros, de donde se deduce, que la apelaciones formuladas por el Club The Strongest y César Farías, tendrán al frente administradores de justicia nada imparciales. Sería oportuno que los apelantes indagaran sobre la trayectoria de sus miembros y de esa manera saber con certeza si han sido parte del Club demandante para que tomen los recaudos antes de que se dicte la Resolución establecida en el Art. 53 del Código de Procedimiento Disciplinario, que puede ser Anulatoria, Confirmatoria o Revocatoria.
En síntesis, los Tribunales de Justicia Deportiva nos muestran una total falta de independencia demostrada con hechos fehacientes que nos llaman a la duda sobre la correcta aplicación de las reglas, con fallos muy discutidos como la Sentencia Condenatoria por dos años al director técnico Farías de acuerdo al Art. 43. Inc. b) del mencionado Código, en su primera instancia.
La pregonada reestructuración del fútbol debe apuntar a que los administradores de justicia deportiva de los departamentos en los certámenes de la división aficionados, estén conformados por profesionales de los Colegios Departamentales de Abogados y de la división profesional por juristas del Colegio Nacional de Abogados, honrándoles los pasajes de traslado a la sede en Cochabamba y los viáticos correspondientes y de esa manera, saber que no habrán fallos parcializados y amañados como a los que nos han estado acostumbrando estos tres Tribunales de Justicia Deportiva.
Dr. Edgar Linares Mariscal, fundador y ex asesor legal de Fabol